Así, de primeras, la idea puede parecer buena: “hago que todo lo que se fabrique fuera sea un 25% más caro y la gente de mi país dejará de comprar esos coches para apostar por los que fabriquemos aquí”.
Dicho así, efectivamente, parece que es un plan sin fisuras. Sin embargo, cuando estamos hablando de la segunda compra más importante de una familia o de una persona después de su casa, debes asegurarte de que el producto que vayas a fabricar en tu país para que la gente opte por él en lugar de por el importado sea, al menos, de una calidad o prestaciones similares.
Porque, de lo contrario, el plan empieza a fallar. ¿Te gastarías un dineral en un coche nuevo si no te convence? Seguramente, no. Lo estamos viendo con los coches eléctricos. Mucha gente prefiere adquirir un usado o pagar más caro otro tipo de mecánica que le convenza más.
Porque, en realidad, quien al final paga os aranceles es el consumidor final. Sí, claro que se le hace daño a la empresa o al país al que se le imponen esos aranceles, pero lo cierto es que, si alguien opta por seguir comprando ese producto, es él quien acaba pagándolo.
Así, los expertos de la web especializada en el sector del automóvil de segunda mano estadounidense iseecars.com acaba de elaborar un informe donde analiza cuánto subirá el precio de los coches más vendidos en Estados Unidos una vez que se le apliquen los correspondientes aranceles. Vemos modelos de marcas norteamericanas como Chevrolet o RAM, pero algunos de sus modelos o versiones se verán afectadas porque se fabrican en México o en Canadá.
En esta imagen podéis ves diferencias de precio antes y después de aranceles:
En el estudio se puede observar cómo el aumento de precio de un coche como el Kia Sportage o el Hyundai Tucson se va por encima de los 8.000 euros, mientras que el Toyota RAV4 alcanza casi una subida de 9.000 euros. Lógicamente, el precio sube más cuanto más caro sea el coche. Así, modelos como el Dodge Charger, la RAM 1500 o la GMC Sierra 1500 sufren una subida de más 16.000 euros. En total, la media de la subida de precio se sitúa ligeramente por encima de los 10.000 euros.
