SUV eléctrico CO2

SUV eléctrico frente a térmico, ¿cuál emite más CO2 a lo largo de su vida?

Las emisiones de CO2 derivadas de la fabricación de un vehículo eléctrico son superiores a las de un térmico compensándose durante su uso. Pero ¿ocurre lo mismo con un SUV eléctrico?
 

Cuando se trata de evaluar las emisiones de CO2 un vehículo a lo largo de su vida útil, debemos tener en cuenta todo el ciclo de vida de éste desde la extracción de las materias primas necesarias para su fabricación hasta su reciclaje. Un aspecto a tener en cuenta en el caso de los vehículos eléctricos es que su fabricación requiere un uso muy intensivo de energía especialmente debido a la manufactura de la batería. SUV eléctrico frente a térmico, ¿cuál emite más gases de efecto invernadero a lo largo de su vida?

Un análisis norteamericano reciente sobre las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) -principalmente CO2, aunque no es el único gas- durante el ciclo de vida de un SUV pequeño, proyectado para el año 2024, revela datos contundentes que posicionan a los vehículos eléctricos como una opción más sostenible y amigable con el medio ambiente.

Según la Oficina de Eficiencia Energética y Energía Renovable del Departamento de Energía de EE. UU., un pequeño SUV eléctrico que salga al mercado en 2024 con una autonomía media de algo menos de 400 kilómetros producirá un 52 por ciento menos de emisiones de GEI a lo largo de su vida útil en comparación con un vehículo de gasolina equivalente.

Uno de los principales factores que explica esta diferencia radica, como es de esperar, en las emisiones generadas por los vehículos de gasolina durante su utilización. Se estima que casi tres cuartas partes de las emisiones de GEI de un vehículo de gasolina provienen directamente del tubo de escape, como resultado de la combustión de combustibles fósiles.

Y es que si bien la producción y distribución de electricidad de VE genera aproximadamente el doble de emisiones de gases de efecto invernadero en comparación con la producción y distribución de su homólogo de gasolina –149 gCO2e/milla vs. 75 gCO2e/milla-, esa diferencia se ve compensada por las emisiones GEI del tubo de escape del vehículo de gasolina. Las únicas emisiones, mínimas, de un vehículo eléctrico durante su uso están relacionadas con los neumáticos y los frenos.

Emisiones de CO2 en la fabricación de baterías del SUV eléctrico

Un aspecto clave a considerar es la producción de baterías, un componente esencial de los vehículos eléctricos. La fabricación de baterías, que tiene en cuenta la extracción y el transporte de los materiales, agrega un estimado de 30 gCO2e/milla a las emisiones de GEI durante la vida útil de un vehículo. Aunque este valor es considerable, sigue siendo marginal en comparación con las emisiones totales generadas por los vehículos de gasolina, especialmente cuando se incluyen las emisiones del tubo de escape.

A medida que la tecnología de baterías continúa evolucionando, es probable que las emisiones asociadas a su producción disminuyan. La eficiencia en la producción y el reciclaje de baterías, junto con avances en materiales y procesos de manufactura, jugarán un papel importante en la reducción de las emisiones de GEI.

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