Casi 300 coches en pista repartidos en distintos turnos. Miles de aficionados en el paddock y en las gradas. Olor a gasolina, a frenos, a neumáticos… Esto no es una carrera, pero no se puede negar que es automovilismo puro y elemental. Tandas Privadas es un club deportivo que organiza eventos en circuito para clientes particulares. Básicamente, su ´modus operandi´ es seleccionar distintos circuitos en territorio nacional, los alquilan durante una jornada completa, y ofrecen la posibilidad de que cualquier conductor con su coche particular pueda acceder a la pista, siempre y cuando cumpla unas mínimas exigencias de seguridad, obviamente.
Desde las 08:00 de la mañana ya suenan los motores en el paddock del Circuito del Jarama, uno de los preferidos por Tandas Privadas por lo bonito de su trazado y por la inmensa afluencia de público que se da cita en él. Hoy es día 30 de diciembre de 2017 y la pista está abarrotada de gente. Hay un listado de participantes y diferentes grupos para pista. Cada uno tiene su horario. A las 18:00 entra a pista el grupo Burned Squad, el único específico para drifting, esa técnica que consiste en avanzar de costado enlazando una curva tras otra. Y entre esos participantes, está el coche de Autofácil, un BMW 325i E36 con preparación específica para drift y que conduce nuestro redactor Eduardo Alonso.
A las 13:00 cargamos el coche en la grúa y nos dirigimos hacia el trazado madrileño. Faltan bastantes horas para empezar, pero no queremos perdernos el ambiente. Aparte, nos han avisado de que hay atasco para entrar al recinto, y es que son miles de personas las que han venido. En el aparcamiento del público general no cabe un alfiler. Una vez dentro, descargamos el coche, todo el material de asistencia, e instalamos dos ruedas nuevas en el eje trasero para que nos duren lo máximo posible. También hacemos algunas comprobaciones: nivel de aceite y refrigerante, frenos, electricidad, presión de neumáticos, freno de mano hidráulico, etc.
Está todo listo. Mientras esperamos, nos deleitamos disfrutando de cómo otros participantes disfrutan de su coche sobre la pista. El hermanamiento que hay llama la atención, compartiendo pista desde un honesto utilitario de no demasiada potencia, hasta coches de alta gama y vehículos de competición. Hay un gran respeto por parte de los participantes, ya que tal y como te avisan en el briefing previo a la carrera, hay pilotos de distintos niveles, y seguro que ninguno quiere volver a casa con el coche dañado. Así que, has de estar atento al retrovisor para facilitar la maniobra a quien te quiera adelantar.
A las 17:30 comienza nuestro briefing. En la tanda de drift la mayoría son coches preparados para tal fin, y por lo tanto todo el mundo sabe lo que hace. De todos, modos, nos dan las principales pautas de seguridad y nos informan de dónde no se puede correr (en la parte de arriba del circuito, en la zona anexa a las viviendas). Nuestro coche, un BMW 325i E36 de 192 CV (quizá alguno más con la leve preparación de motor que lleva), está ya en la rampa de salida, y Claudia, David, Aroa, Manuel, Antonio, Diego y Carlos, siete lectores de Autofácil, están ya casco en mano dispuestos a montarse de copilotos. Algunos con más nervios que otros.
Comienza la tanda, y decido dar la primera vuelta yo solo para verificar cómo va el coche y cómo está el asfalto. Todo en orden, así que me detengo y se sube el primero. Le atamos los arneses y salimos a pista. Primera marcha a fondo, segunda a fondo, tercera, freno, de nuevo segunda y tirón al freno de mano hidráulico. El coche comienza a virar y, a base de gas, completamos la primera curva completamente de costado. Tras ella, llegamos al ´Super 7´, la zona de curvas enlazadas más propicia para drift, ya que si lo haces bien, puedes enlazar todo el tramo ´de costado´. La idea es dar dos vueltas con cada copiloto, y el primero de ellos está disfrutando como un niño. A final de recta llegamos a 180 km/h (el coche no alcanza mucho más, ya que cuenta con un desarrollo acortado para mejorar su aceleración). De nuevo reducimos de quinta a segunda marcha y tiro del freno de mano. Noto que las ruedas delanteras adquieren ya su temperatura adecuada y el coche se siente mucho más ágil y noble. Las traseras, por su parte, se desgañitan sobre el asfalto.
Con cada copiloto, la experiencia mejora, aunque las ruedas traseras, lógicamente, cada vez están peor. Incluso comienzo a sentir y escuchar cómo empiezan a deshacerse, pero una bandera roja temporal, ocasionada por una salida de pista, nos da un poco de tregua y logramos acabar la tanda sin cambiar las ruedas, si bien acabaron literalmente en las lonas. Todos los pilotos se comportan de forma sobresaliente en pista, apartándose cuando llegamos más rápido, y de igual manera actuamos nosotros. La sensación de enlazar el ´Super 7´ de costado mientras las cámaras fotográficas te disparan decenas de flashes, es sensacional.
Al final, mientras volvemos a montar el coche en la grúa de vuelta a casa, recapitulamos y la experiencia ha sido sensacional. El coche se ha portado muy bien, no hemos tenido percance alguno, y los siete lectores se van a casa habiendo disfrutado de una gran experiencia. Por cierto, pretendemos repetirlo, así que estate atento a nuestras redes sociales porque, si te animas, podrías ser uno de los próximos copilotos.
Cómo apuntarte con tu coche
La cosa promete, ¿verdad? Pues, ¿quieres saber cómo puedes ser tu uno de los pilotos de Tandas Privadas? Pues vamos a explicarte lo más importante. Lo primero que debes hacer es entrar en la web del evento y ver qué fechas y qué circuitos están en la programación, aunque también lo publican en sus redes sociales (ya te adelanto que el 10 de febrero hay una tanda, también en el circuito del Jarama). Luego, sólo has de apuntarte. Los precios suelen oscilar entre 59 y 200 euros en función del tiempo que quieras estar en pista y de la fecha en la que lo adquieras (hay descuentos para los primeros apuntados). Después, conviene que efectúes una buena revisión a tu coche. La mayoría de participantes entran a la pista con su coche particular, y los coches de calle tienen ciertas limitaciones dentro de la pista. Has de revisar todo, pero con especial hincapié en el sistema de refrigeración, los frenos y los neumáticos. Y, si es tu primera vez, también conviene que visualices algún video ´on board´ de alguna tanda previa para que te aprendas el trazado.
Y ya en pista, hay cosas que debes tener en cuenta. En cuanto al coche, estate atento al indicador de temperatura, y no abuses en exceso de los frenos, ya que podrías fatigarlos antes de tiempo. Recuerda que es un coche de calle€ Todos tus movimientos sobre el coche han de ser suaves y decididos. Por contrario que parezca, en circuito has de ser lo más suave posible en la conducción. Muy atento al retrovisor, ya que si viene un coche más rápido, debes dejarlo pasar para evitar un golpe (recuerda que, en circuito, el seguro del vehículo no te cubre) y vete incrementando el ritmo poco a poco. El Jarama es un circuito con partes muy complicadas, como las ´eses´ de Ascari o la bajada de Bugatti. Fíjate en las trazadas de los más expertos, sé suave con el volante, y no levantes el ´gas´ cuando tengas el coche plenamente apoyado en curva, ya que podrías hacer un trompo. Otro aspecto importante concierne a las escapatorias. Si te sales de pista, procura hacerlo siempre de frente, ya que si entras de lado, la grava podría hacer que el coche volcase. Como decía, lo mejor es comenzar a un ritmo tranquilo e ir incrementándolo según ganes confianza. Y disfruta, ya que estas tandas están para eso. Hay muchos participantes, pero por lo general todos son respetuosos y conscientes de que hay pilotos lentos, medios y rápidos, así que con unas pequeñas pautas, no tendrás problema alguno. Estate atento a Tandas Privadas… ¡y nos vemos en la próxima!