Desde principios del siglo pasado hay dos referentes en el mundo de las berlilnas de alto lujo: Rolls-Royce y Bentley; pero las marcas japonesas también saben fabricar limusinas y la mejor prueba de ello es el Toyota Century. El modelo japonés llegó al mercado en 1967 y ahora estrena su tercera generación que, de igual manera que sus predecesores, no tienen nada que envidiar a cualquier modelo de las citadas marcas británicas.
Y es que, a pesar de su discreto diseño, esta berlina se ha convertido en la opción favorita de los japoneses más pudientes y hasta el Emperador Akihito la utiliza para sus desplazamientos, tanto en su variante estándar como en la versión Royal, que supera los 6,1 metros de longitud. Ahora se renueva por completo, pero no renuncia a la imagen sobria y clásica que le caracteriza, si bien, por dentro, los cambios son de gran trascendencia..
Un salón con ruedas
Calca las cotas del modelo anterior, por lo que mide 5,34 metros de longitud y su distancia entre ejes es de 3,09 metros. Gracias a ello, ofrece un enorme interior con mucho espacio para los pasajeros y la carga y, por supuesto, permite configurar el habitáculo con cuatro plazas independientes para asegurar el máximo confort de los ocupantes de los asientos traseros. También cuenta con un equipamiento más completo y no faltan las grandes pantallas en el salpicadero y en la parte de atrás. El cuero y la madera revisten cada rincón del interior y, como no podía ser de otra manera, sus ajustes son exquisitos.
En la parte técnica, las novedades afectan al chasis y a la suspensión neumática, que presenta una puesta a punto enfocada al confort. Los ingenieros de Toyota han prestado especial atención a los neumáticos y al aislamiento acústico de la cabina para reducir al máximo el ruido en el interior. Pero lo más interesante se encuentra bajo el largo capó, que esconde un sistema de propulsión híbrido formado por un motor V8 atmosférico de gasolina de 5.0 litros que rinde 381 CV y por un propulsor eléctrico de 224 CV; en conjunto, el Toyota Century tiene 431 CV y es notablemente más eficiente que el V12 atmosférico de la segunda generación.
En materia de seguridad, incorpora los últimos sistemas de asistencia a la conducción de Toyota. Destaca la frenada de emergencia con detección de vehículos y peatones, la alerta de cambio de carril involuntario, el control de crucero adaptativo o los faros delanteros de tipo led con luces de carretera automáticas.