La tecnología de pila de combustible está ahí, pero tiene todavía más problemas para su expansión que la de la electrificación pura. Aunque hay proyectos y notables expectativas asociadas sobre todo al transporte de mercancías -largas, medias y cortas distancias-, a nivel de turismos destaca la fragilidad de un sector que aún lucha por encontrar su lugar en el mercado automovilístico.
La disminución, con los resultados del primer semestre del año encima de la mesa, ha afectado a casi todas las regiones y fabricantes. Hyundai, que lidera el mercado con su SUV Nexo y el autobús Elec City, ha visto cómo sus matriculaciones se desplomaban un 42,6% en la primera mitad del año, pasando de 3.198 unidades en 2023 a solo 1.836 entre enero y junio de 2024. Toyota, por su parte, ha experimentado una caída aún más pronunciada, del 44,9%, con apenas 1.284 unidades vendidas de sus modelos Mirai y Crown. Estos dos gigantes de la industria representan conjuntamente más de la mitad del mercado global de FCEV, aunque su cuota ha disminuido del 64,8% en 2023 al 55,5% en 2024.
Y una vez más China emerge como el único mercado que ha logrado mantener una cierta estabilidad, aunque con matices. Mientras que el país asiático registró una caída del 16,5% en las ventas de FCEV, su participación en el mercado global aumentó del 35,1% al 44,5%, superando a Corea del Sur, cuya cuota cayó drásticamente al 31%. El nuevo monovolumen Haima 7X-H, basado en una pila de combustible proporcionada por Toyota, contabiliza ya 23 unidades comercializadas, aunque esta cifra es aún insignificante en el contexto global. De cualquier modo, China lidera el mercado FCEV mundial con 2.501 unidades comercializadas en la primera mitad del año -2.478 unidades para el sector de comerciales-.
En Estados Unidos, la situación no es menos tranquilizante, con una reducción del 82,4% en las matriculaciones, bajando de 1.825 unidades en 2023 a solo 322 en 2024. Este desplome refleja no solo los desafíos inherentes a la infraestructura de recarga y el coste del hidrógeno, sino también la falta de confianza del consumidor, exacerbada por problemas técnicos en algunos modelos y el retiro de Shell de su proyecto de estaciones de recarga en California.
A pesar de este panorama sombrío, Japón y Europa destacan como las únicas regiones donde las ventas de FCEV han mostrado crecimiento. En Japón, las matriculaciones aumentaron un 117,8%, impulsadas por el éxito del Toyota Crown, mientras que en Europa, el mercado creció un 21,5%, con un total de 594 unidades matriculadas.
Queda mucho camino por andar y aunque el hidrógeno sigue siendo una apuesta a largo plazo para la movilidad sostenible, los desafíos actuales en infraestructura, costes y confianza del consumidor están frenando su adopción, poniendo en duda su viabilidad en el mercado global a corto plazo. De momento, el próximo mes de septiembre Hyundai presentará su nuevo Nexo con el que quiere seguir avanzando con esta tecnología que ellos mismos crearon a partir de un ix35 hace más de una década y gracias a una tecnología en la que vienen trabajando desde principios del milenio.
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