A lo largo de los últimos días, el preparador Novitec ha sido el que más activo se ha mostrado a la hora de enseñarnos sus últimas creaciones. Sin embargo, los alemanes de AC Schnitzer también quieren tener su cuota de protagonismo este verano y acaban de presentar su propia interpretación del BMW 540i, a la espera de que llegue el ansiado BMW M5 2018. Se trata de una berlina con mucho carácter que no modifica únicamente su aspecto exterior, sino que su mecánica también cuenta con una mejora notable en potencia.
Además, han sido sustituidas varias piezas de la versión original para mejorar el rendimiento del vehículo. Entre otros añadidos, AC Schnitzer ha cambiado los paragolpes, que tienen un diseño bastante más radical, ha instalado un splitter frontal, ha colocado sobre el portón trasero un alerón -de dimensiones bastante contenidas, eso sí- y ha incluido detalles en la carrocería fabricados en fibra de carbono. La línea de escape también es nueva y las salidas se pueden escoger en tonos cromado y negro.
Estéticamente, este BMW 540i al que AC Schnitzer ha ´metido mano´ destaca a través de una suspensión rebajada en 25 mm en el eje delantero y en 20 mm en el trasero con respecto al BMW 540i de serie. Asimismo, cuenta con un difusor trasero que integra cuatro salidas de escape -dos a cada lado- y con unas llantas específicas. Por otro lado, el habitáculo exhibe menos cambios, no en vano incluye unas alfombrillas de terciopelo, una serie de logos específicos de esta versión y unos pedales terminados en aluminio.
Lo mejor, bajo el capó
Como pasa en la mayoría de estos casos, lo más interesante de este coche es su ´corazón´. El motor gasolina de 3.0 litros y seis cilindros en línea eleva su potencia hasta los 400 CV -por los 340 CV de la versión original- manteniendo, según AC Schnitzer, el consumo medio homologado -6,5 l/100km-. Mientras tanto, también ofrece las mismas modificaciones para la variante diésel 530d, al que lleva hasta los 315 CV -la variante estándar cuenta con 265 CV-.
