Sabíamos a lo que veníamos: los motores V12 tienen las horas contadas, como también los superdeportivos sin electrificación. El Aston Martin DBS, siendo uno de ellos y, además, llevando ya casi cinco años a la venta en su actual forma, sería uno de los superdeportivos en caer, lo cual ya ha sido confirmado por Aston Martin.
Pero un coche así tiene que irse con honores. Se despedirá con la edición limitada 770 Ultimate, de la que se construirán 300 unidades en formato coupé, y otras 199 adicionales en formato Volante, que es la denominación que emplea la marca para sus coches descapotables. Con 770 CV bajo su capó, se convertirá en el Aston Martin de calle más potente del momento, si exceptuamos los Valhalla y Valkyrie.

Para ganar esos 45 CV extra respecto al DBS Superleggera, que cuenta con 725 CV, Aston Martin ha actuado sobre tres áreas del propulsor 5.2 V12 biturbo: el colector de admisión, el colector de escape y la presión de la sobrealimentación. No logra mejorar los 3,4 segundos que precisa el Superleggera para pasar de 0 a 100 km/h (en estos niveles de potencia, es perfectamente normal), como tampoco los 339 km/h de velocidad máxima, pero a buen seguro el 770 Ultimate correrá más una vez lanzado.
También hay diversas alteraciones tanto en el chasis como en la carrocería. La suspensión adaptativa ha sido reajustada, la dirección presenta distintos y más rígidos puntos de anclaje en la columna en busca de un mejor tacto en conducción deportiva, y la transmisión efectúa cambios de marcha de manera más rápida, aunque Aston Martin no especifica cuánto más rápido. Claro está que conserva los frenos de material carbocerámico y el diferencial de deslizamiento limitado del DBS Superleggera.

En lo que respecta al diseño, luce paragolpes y difusor trasero específicos, como también lo son las llantas de 21″. Asimismo, hay una gran toma de refrigeración en el capó y unos apliques de fibra de carbono en la parte baja de la carrocería. Ese mismo caro material es el empleado en las levas del cambio. También hay unos asientos exclusivos, diversas inscripciones identificativas y una placa numerada de la correspondiente edición limitada.
Las primeras unidades serán entregadas en verano de este mismo año 2023 y, aunque aún no conocemos su precio, podemos esperar una tarifa que superará, y no por poco, los 300.000 euros. Hasta siempre, Aston DBS.
