Una investigación realizada por Institute Insurance for Highway Safety ha concluido que, gracias a los sistemas de frenada automática de emergencia, los impactos por alcance entre vehículos han descendido en un 40%. Esta tecnología, unida a todas las demás que ya incorporan multitud de modelos del mercado, como por ejemplo el asistente de mantenimiento de carril, el control de crucero adaptativo con radar de proximidad o el aparcamiento asistido han hecho que se ponga en duda la necesidad de contratar una póliza de seguros tal y como la conocemos hoy en día cuando lleguen los coches autónomos.
Según los multimillonarios estadounidenses Warren Buffet y Bill Gates, ya no será necesario hacer un seguro para el automóvil. Lo cierto es que las compañías aseguradoras tendrán que ofrecer nuevos productos adaptados a las necesidades futuras, y es que aunque seguro que seguirá habiendo accidentes de tráfico, la amplia mayoría estarán relacionados con las infraestructuras construidas para la circulación de los coches autónomos. De hecho, la responsabilidad ya no podrá recaer sobre el conductor, pues todos los integrantes del vehículo serán pasajeros.
De este modo, lo más lógico sería que se crease un seguro de responsabilidad civil en el que el propietario del automóvil fuese el titular. Igualmente, como el precio de las primas se basa en la siniestralidad, éste debería bajar de una forma directamente proporcional al de los accidentes, cuyo volumen será insignificante. En cualquier caso, los expertos creen que durante los próximos años el sector asegurador sufrirá un proceso de transición a la espera de que llegue el verdadero cambio.
Por el momento, la empresa Adrian Flux, de Reino Unido, ya cuenta en su oferta con la primera póliza del mundo especial para coches autónomos. Muchas de las cláusulas aluden a sistemas tecnológicos, desde la no actualización del software por parte del propietario durante las 24 horas posteriores a su lanzamiento hasta los fallos del sistema operativo del fabricante, pasando por los intentos de hackeo o los apagones del sistema de navegación.