En qué debes fijarte al comprar un monovolumen urbano de segunda mano

Enrique Espinós
Enrique Espinós

Si estás interesado en la compra de un monovolumen urbano de ocasión, hay una serie de aspectos que tendrías que revisar antes de adquirir el vehículo.


Los mnonovolúmenes urbanos gozaron de bastante éxito hace una década, pero en la actualidad se han visto desplazados por los SUV urbanos, cuya estética resulta más atractiva. En cualquier caso, estos vehícuos pueden resultar una buena opción de compra por su practicidad y economía de uso.

Si te decides por adquirir uno de ellos conviene que, antes de cerrar la compra, inspecciones una serie de puntos, para evitar sorpressas desagradables.

A continuación desglosamos, gracias a Miguel García –ex-jefe de postventa de Renault, Toyota… y colaborador técnico de Autofácil– cuáles son esos puntos a revisar.

EN LA DIRECCIÓN

Este elemento sufre debido a las maniobras que se realizan en ciudad, con los bordillazos que se suelen dar al aparcar… Comprueba que no tenga holgura girando el volante a tope hacia los lados. Verifica también que no se produzcan ruidos extraños al manipular el volante -podrías tener que cambiar una rótula de dirección, desde 120 euros… o toda la cremallera, desde 500 euros-.

EN EL EMBRAGUE

Otra pieza que sufre en un coche manual que circule por ciudad es el embrague -sustituirlo, desde aproximadamente 500 euros-. Para comprobar su estado, introduce la 1ª marcha, acelera hasta aprox. 1.500 rpm y suelta el pedal hasta que el coche empiece a andar: debería hacerlo de forma progresiva, sin tirones o vibraciones.

EN EL TURBO -SI LLEVA-

Lo incorporan todos los motores diésel modernos y cambiarlo te costará desde 900 e. En parado, y al acelerar, nunca deberías escuchar silbidos. En marcha y para comprobar su estado, circula en 3ª y acelera a fondo: la respuesta del motor debe ser lineal y sin pérdidas de potencia. Si no es así, puede que debas cambiarlo.

ATENTO TAMBIÉN A…

Abre el capó y, con el motor en marcha, vigila que no se escuchen ruidos extraños: por ejemplo, chirridos ni claqueteos exagerados. Asimismo, comprueba que no existan fugas de aceite ni de otros líquidos.

EN LOS FRENOS

En parado y con los frenos fríos, toca con un dedo -a través de la llanta- los discos y comprueba que su superficie resulte plana y no se marca ningún escalón o desgaste cerca de los bordes. Si es así, deberás cambiarlos, desde aprox. 400 e/dos unidades.