Prohibición de coches de combustión en 2035: qué es verdad y qué es mentira

Eduardo Alonso
Eduardo Alonso
Habrás leído en muchos sitios que los coches de combustión estarán prohibidos a partir de 2035. Sigue leyendo y sabrás la auténtica verdad.

No sólo sucede con este asunto, sino casi con cualquiera que afecte a la sociedad de una manera importante. Pasa con la política, con la economía y también con la movilidad y la automoción. Hay periodistas que buscan la alarma social con un titular muy sensacionalista que, en ocasiones, no responde a la verdadera realidad. El mensaje que se extrae de ese titular, a veces, se difunde en bares, gimnasios, puestos de trabajo o reuniones de amigos alimentando el desconocimiento y confusión de la sociedad.

Esto está pasando, al pie de la letra, con todo lo relativo a la movilidad, ya sea en cuanto a las restricciones de circulación (es mentira que en 2023 no vayas a poder circular con tu coche sin etiqueta bajo ninguna circunstancia), como en cuanto a la fabricación y venta de vehículos de combustión.

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Habrás escuchado en varias ocasiones que los motores de combustión tienen los días contados. Eso es cierto, pero no morirán en un espacio medio de tiempo. Y, desde luego, que en 2035 estarán prohibidos los coches de combustión, es absolutamente mentira. O, al menos, habría que ser mucho más preciso para argumentar eso. ¿Quieres saber toda la verdad y nada más que la verdad? Pues toma nota que ahí va.

La Comisión Europea propuso la prohibición de la matriculación de vehículos de combustión a partir de 2035, cosa que posteriormente ratificó el Parlamento Europeo y el Consejo de la Unión Europea previo acuerdo con cada uno de los 27 estados miembros. Aquí es crucial subrayar la palabra ‘matriculación’. A pesar de lo que hayas podido escuchar o leer, esta medida no implica la defunción de los coches de combustión en 2035. ¿Cuál es la verdad?

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La medida establece que a priori no podrás comprarte un coche nuevo en 2035 que no sea eléctrico, pero podrás seguir circulando con tu coche de combustión comprado antes de esa fecha, incluso si esa fecha es 2034. Aparte, hay una esperanza para los motores de combustión, y es que podrán seguir comercializándose siempre y cuando se alimenten de combustibles neutros en carbono, lo que viene a significar que deben utilizar combustibles sintéticos o biocombustibles (aquí puedes leer un fantástico artículo al respecto dividido en dos partes: Uno y Dos). Esos combustibles no añaden CO2 a la atmósfera, ahí está la clave. Otra cosa es que el desarrollo de los mismos compense, pero eso ya es asunto diferente.

Incluso hay un tercer, cuarto y quinto escenario en el que en 2035 podrás seguir conduciendo un coche de gasolina. El tercero es que la normativa contempla poder importar y matricular coches clásicos, los que por entonces puede que incluso sean los fabricados antes de 2010. El cuarto es que los fabricantes que venden menos de 10.000 coches al año tienen una moratoria de un año, por lo que podrán seguir vendiéndolos hasta 2036. Y el quinto es que esta normativa no afecta a los fabricantes minoritarios que construyen menos de 1.000 vehículos al año.

Todo esto va en una dirección: alcanzar la neutralidad climática en 2050. Antes de eso, el objetivo es que, en 2030, las emisiones contaminantes del parque automovilístico se hayan reducido en un 55% respecto a 2021, para lo cual jugará un papel relevante la revisión de las etiquetas medioambientales que llevarán a cabo muchos países, así como el compromiso de la UE para favorecer el que se abarate la compra de vehículos eléctricos.