No hace tanto en verdad. Me refiero a cuando bastante más de la mitad de coches que se vendían eran diésel. A día de hoy no llegan ni al 9% del total. Y es que claro, la mayoría de fabricantes los han descartado, eliminado de sus gamas de coches pequeños y medianos.
Por ejemplo, entre los urbanos, sólo el Renault Clio cuenta con una versión diésel y únicamente se puede asociar al acabado básico Evolution. Parece ideada para flotas, pero a mi modo de ver es una opción fantástica también para particulares.
¿En qué casos? Pues en los que precises un coche sencillo y barato que gaste muy poco. Este Clio diésel cuesta 20.436 euros. Hay que poner 4.000 euros más para encontrar el siguiente diésel más barato, que es ya un Citroën Berlingo, e irse a rondar los 30.000 euros si quieres un compacto de gasóleo.
Por qué interesa este Clio diésel
Porque además de ser barato, homologa un consumo de 4,1 L/100 km que en uso real bien puedes mantener sin problema por debajo de 5,0 L/100 km en uso combinado. Gasta muy, muy poco este veterano motor 1.5 dCi, que en el Clio se ofrece en configuración de 100 CV de potencia y 260 Nm de par.
Se asocia a una transmisión manual de seis velocidades y ofrece prestaciones más que válidas, pues puede acelerar de 0 a 100 km/h en 11,4 segundos y alcanzar 188 km/h de velocidad punta.
Y no sólo es apto para ciudad. Su buen chasis le convierten en una ahorradora herramienta de transporte también para carretera, donde no peca de poco confort. Tiene un depósito de gasóleo de 39 litros, por lo que si estimamos un consumo real de 5,0 L/100 km, significa que podemos recorrer más de 700 km entre repostajes sin ningún problema.
Su carrocería mide 4,05 metros de largo, 1,80 metros de ancho y 1,44 metros de alto. Y cuenta con un maletero de 315 litros de capacidad. Por el precio de 20.436 euros viene en color naranja (que no le queda nada mal), pero tienes otras seis tonalidades alternativas en opción por entre 300 y 650 euros.
Ojo, no es ninguna mala compra si haces más de 20.000 km al año, especialmente circulando por mucha carretera y autopista. Tiene etiqueta C, claro, pero si no necesitas un distintivo con más privilegios… ¿qué problema hay?
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