Adquirir una berlina del segmento F no tiene que suponer una renuncia a la deportividad, o al menos así lo piensa Alpina, que se presentará en el Salón de Ginebra -en marzo- con su modelo B7 xDrive. Basado en el BMW 750i xDrive, parece que será el que ejerza de BMW M7 después de la negación de la firma bávara a fabricar su berlina más lujosa con algo más de ´picante´. De esta forma, si nos apetece un BMW Serie 7 radical, tendremos que recurrir al preparador que tantos años lleva trabajando con vehículos de BMW.
Al igual que su base, el motor que incluye es un bloque gasolina biturbo V8 4.4 capaz de entregar 600 CV, superando así en 150 al 750i xDrive gracias a modificaciones mecánicas entre las que se incluyen un intercooler rediseñado, nuevos turbos, un sistema de admisión modificado y pistones reforzados. Junto a una caja de cambios automática de 8 velocidades y a la tracción total xDrive, a este Alpina B7 se le atribuyen unas prestaciones -todavía tienen que ser confirmadas oficialmente- de 3,7 segundos en el 0 a 100 km/h y una velocidad punta de 311 km/h.
Además, para subrayar su deportividad, la suspensión ha sido ´tocada´, disminuyendo su altura libre al suelo y con amortiguadores adaptativos; y el eje trasero se convierte en direccional. Lo mismo le ha ocurrido a su aspecto: añade unos paragolpes y llantas exclusivas -que podrán ser de hasta 21 pulgadas-, cromados y dos salidas de escape dobles integradas en un difusor trasero. Por su parte, en el habitáculo nos encontramos con un despliegue de cuero en prácticamente cualquier rincón, elementos específicos decorativos -las molduras están terminadas en negro piano o en madera-, cámara de visión trasera y sistema multimedia y de navegación BMW, entre otros.