Después de ganar las 24 Horas de Daytona y subirse a su Toyota TS050 Hybrid para llevar a cabo unas jornadas de test en Sebring, Fernando Alonso ha viajado hasta Woking para conocer el McLaren MCL34 unos días antes de su presentación oficial.
El piloto asturiano sigue ligando al fabricante británico y, aunque no participará en la temporada 2019 de Fórmula 1, podría subirse al monoplaza de Woking para ponerlo a punto en los test que se llevarán a cabo este mes en el circuito de Montmeló. La presentación oficial del Mclaren MCL34 que pilotarán Lando Norris y Carlos Sainz tendrá lugar el próximo 14 de febrero, si bien no lo veremos en movimiento hasta su debut en Montmeló el día 18 de este mes.
Puerta abierta a la Fórmula 1
Todavía no se ha confirmado si Fernando Alonso pilotará el nuevo bólido de McLaren, pero todo apunta a que el viaje del asturiano a las instalaciones de la compañía inglesa tenía como objetivo crear su asiento a medida para el MCL34. Teniendo en cuenta la experiencia de Alonso y su buena relación con el equipo de ingenieros que está desarrollando el nuevo Fórmula 1 de McLaren, tiene sentido que participe en los test para aportar información de cara a la puesta a punto del coche.
Lo que está claro es que Alonso se niega a decir adiós a la Fórmula 1 y, con este viaje, deja patente que seguirá ligado al Gran Circo. De esta forma, no es descabellado pensar que podría volver a la Fórmula 1 más adelante, puede que en 2020, siguiendo así los pasos de otros pilotos que abandonaron la competición para volver tiempo después, como Michael Schumacher, Kimi Räikkönen o Alain Prost, que volvió a la F1 tras un año sabático para ganar su cuarto título mundial. Niki Lauda también se fue, volvió y ganó otro campeonato del mundo antes de retirarse definitivamente de la máxima categoría del automovilismo.
