Aprovechando la llegada de su sexta generación, la cual incorpora mejoras futuristas tanto en tecnología como en comportamiento, hacemos un breve repaso de cada una de ellas y que, cada cual a su manera, ha puesto su granito de arena en la evolución de los automóviles en casi 40 años de historia.
1977: PRIMERA GENERACIÓN
En 1977, BMW presenta la primera generación del BMW Serie 7 -conocida como E23-. Fue la primera gran berlina que añadía un toque de deportividad a un segmento más bien conservador. Contaba con un diseño muy moderno para la época, heredado del BMW Serie 6, y nuevos sistemas electrónicos, motores y bastidor, este modelo llegó a desarrollar hasta 252 CV en su versión más potente con un motor sobrealimentado de 3.2 litros.
Fue uno de los primeros vehículos en el mundo en incorporar ABS, e incluso añadió en sus últimas versiones ordenador de abordo y un cambio automático. En total se vendieron más de 280.000 unidades en todo el mundo hasta su desaparición en 1986.
1986: SEGUNDA GENERACIÓN
Las expectativas estaban altísimas después del éxito de la primera generación, pero la segunda entrega del BMW Serie 7, conocida como E32, las superó con creces. Mejoró sus motores, cajas de cambio y bastidor, y la electrónica controlaba el motor y los sistemas de seguridad. En 1987 era lanzado un bestial 750i con 12 cilindros, 5.000 cc y 300 CV.
Estrenó una caja de cambios que se adaptaba electrónicamente al estilo de conducción, considerando las condiciones del tráfico. Poco antes de su desaparición, lanzó una versión larga denominada «L», y superó a su predecesor con la venta de más de 310.000 unidades.
1994: TERCERA GENERACIÓN
En la tercera generación, denominada E38, lo más destacable fue el paso adelante que dio en agilidad un vehículo tan pesado. Su diseño ganó en elegancia, y llevó su motor más potente hasta los 5.400 cc y los 326 CV, reduciendo el consumo mixto homologado en un 11% y deshaciéndose de sus rivales a golpe de eficiencia. Frente a los Audi A8 o Mercedes Clase S con los que competía destacaba por su tacto deportivo.
Introdujo en sus versiones tope de gama el control automático de la estabilidad –ASC- y el control dinámico de la estabilidad y tracción –DSC 2-. Otros extras como asientos de piel de una calidad exquisita o el primer sistema de navegación europea fueron tendencia, pero la gran novedad fue la inclusión del primer motor diésel en este modelo, un 725 TDS de 143 CV y que sirvió de referencia para los futuros 730d y 740d -fue la primera berlina con motor diésel V8-. Se vendieron 330.000 unidades aproximadamente.
2001: CUARTA GENERACIÓN
Supuso el cambio más radical en la historia del BMW Serie 7. De hecho, este BMW es considerado el precursor de una revolución tecnológica con sistemas que siguen utilizándose a día de hoy –con su consiguiente evolución-. Tuvo una concepción nueva de dinamismo, y funcionalidades como el control por voz o el mando giratorio iDrive fueron una realidad. El más potente fue un 745i con 333 CV y una nueva caja automática.
A partir de estas mejoras, el Serie 7 consiguió reducir el consumo respecto a su anterior generación en un 14%, cumpliendo así la normativa EU4. El catálogo opcional demostraba estar a la vanguardia del segmento Premium con equipamiento como el control electrónico de la amortiguación o sistema Soft Close, que cerraba la puerta en caso de estar mal cerrada.
2009: QUINTA GENERACIÓN
En la quinta generación se redefinió el concepto de lujo y tecnología. Se amplió la distancia entre ejes en 140 mm para dotar al Serie 7 del máximo confort interior, y la tecnología EfficientDynamics consiguió dotar al modelo de una potencia y rendimiento excepcionales con un consumo de combustible ridículo, terreno en el que influyó también la utilización de materiales ligeros en su construcción.
Los mandos interiores y el iDrive se modernizaron por medio de una pantalla a color de 10,2 pulgadas, a la vez que se implementó el sistema BMW ConnectedDrive, que mantiene al conductor conectado con el coche y con el mundo que le rodea. Entre los propulsores, destacó el único V12 que sigue a vigente a día de hoy en BMW: el 760i de 544 CV.
2015: SEXTA GENERACIÓN
En el año actual se estrena la sexta generación del Serie 7, la cual propone una experiencia diferente a las conocidas al frente de un volante. Con el desarrollo tecnológico, el nuevo modelo es un compendio de funciones automatizadas y uso de materiales ligeros en su fabricación y de lujo en su interior. Además, trae consigo el 740e, una versión híbrida-enchufable.
El peso de la anterior generación se reduce en 130 kg con la estructura Carbon Core, trasladada desde la serie «i». Motores eficientes de 8 cilindros se asocian a una caja Steptronic de 8 velocidades, pudiendo combinarse con la tracción total xDrive. La pantalla táctil con control gestual también supone una novedad, pero indudablemente lo que más destaca es su aparcamiento remoto y los faros que incluyen luz con tecnología láser.