¿Tu mecánico pasa la ITV por ti? Deberías tener en cuenta esto

Cuando uno lleva su coche al taller y lo deja para cualquier operación de mantenimiento, revisión o para algún servicio como pasar la ITV, el cliente debe saber que es muy probable que su coche tenga que circular por la calle para, por ejemplo, comprobar el correcto funcionamiento del coche o para pasar la propia ITV. Y, por tanto, está expuesto a posibles sanciones en caso de que el ocasional conductor cometa alguna negligencia durante el desplazamiento de la que sólo él es el responsable.

¿Cuál es la mejor hora para pasar la ITV?

¿Cuál es la diferencia entre una ITV negativa y una ITV desfavorable?

Por eso mismo, en todos los talleres están obligados a entregarnos un resguardo de depósito del vehículo, un documento que nos servirá para acreditar que nuestro coche estaba allí mientras trabajaban con él. Así, en caso de que recibamos alguna multa (por velocidad, mal estacionamiento…) en la que no se haya identificado al conductor, nosotros podremos demostrar que el coche estaba en el taller y que, por tanto, la responsabilidad es de ellos.

Así nos lo confirma María Oliva Gómez, del departamento jurídico de CEA: “Si hay una denuncia donde no se ha identificado al conductor, (por ejemplo, multa de radar) lo primero que va a llegar al propietario es un requerimiento para que identifique a la persona que conducía el vehículo en el momento de la infracción, por lo que deberá identificarlo, si desconoce los datos personales del mismo, deberá acreditar que no se hallaba en posesión del vehículo e identificar al taller o empresa que custodiaba el vehículo. Si tiene documentación que lo acredite, se recomienda adjuntarla.”

Qué datos debe tener el resguardo de depósito

En este documento, que consta de dos copias (una para el taller y otra para el cliente), deben estar incluidos los datos del propio taller, tales como el número del taller o su identificación fiscal y domicilio.

También deben aparecer diferentes datos del vehículo, como la marca y modelo, matrícula y números de kilómetros que tiene, así como una breve descripción de las operaciones que se van a realizar en el coche. Así mismo, tiene que añadirse la fecha en la que se deja el coche y cuándo está prevista su recogida. Ojo, porque no siempre se escribe la hora, y es muy importante que aparezca reflejada para estar seguros de quién conducía el coche en caso de que nos notifiquen una sanción.