Puede que sea porque está llegando al final de su vida tal y como le conocemos pero lo cierto es que casi cada semana nos llega una nueva reinterpretación del Land Rover Defender. Si hace poco veíamos cómo el diseñador Paul Smith daba su propia visión, el último corre a cargo del carrocero británico Kahn Design quien ha cogido al todoterreno inglés para transformarlo en un pick up.
Hasta ahí puede incluso parecernos normal pero lo más característico no es eso sino su nombre. Sí, el nombre de Flying Huntsman 105 ya nos da una pista de lo que ha cambiado en el modelo inglés, o al menos de cuánto ha sido la modificación. Y es que los 105 hacen referencia a la distancia entre ejes, en pulgadas, de la que hace gala este peculiar –y único- Defender. Así, con una batalla de 2,66 metros, dicha preparación tiene 30,6 centímetros más de distancia entre ejes que un Defender convencional.
Pero además, este Flying Huntsman 105 posee unas vías que han sido ensanchadas en otros 15 centímetros al tiempo que también monta nuevas llantas o un interior renovado, con un nuevo tapizado para el salpicadero, los paneles de las puertas, el techo e incluso los asientos, que ahora tienen una forma más deportiva. Pero además, se ha incluido un reloj de la marca Churchill mientras que el volante y los pedales se han recubierto de aluminio.
Frente a todos estos cambios, destaca que el preparador británico no haya querido ´meter mano´ al propulsor, manteniendo así intacto el 2.2 diesel de 122 CV. El Flying Huntsman 105 Pick Up ya se puede adquirir en el Reino Unido con un precio de partida de 58.875 libras, (unos 82.300 euros).
