En el mercado de compraventa de coches de segunda mano una práctica de la que habrás escuchado hablar mucho es la de la manipulación del cuentakilómetros del vehículo. Es decir, el vendedor reduce los kilómetros reales que tiene el coche con el objetivo de obtener un precio de venta mayor y, al mismo tiempo, hacer que resulte más atractivo para los posibles compradores.
Sin embargo, manipular el cuentakilómetros de un coche es un delito que está penado con multas económicas e, incluso, condenas de prisión, según el país. Además, aunque trucar el kilometraje de un coche puede llegar a ser relativamente sencillo según el modelo, hacerlo sin dejar una sola evidencia, no lo es tanto ya que hay pistas que nos harán sospechar; como, por ejemplo, un desgaste que no corresponde a los kilómetros que marca el vehículo en elementos como asientos, volante, pastillas de freno, entre otros.
Las sanciones por manipular el cuentakilómetros varían mucho
CarVertical, empresa de datos de automoción, ha realizado una investigación en 22 países de Europa y Estados Unidos para averiguar cómo los gobiernos locales tratan el fraude por la manipulación de los cuentakilómetros y qué tipo de normativas y penas tienen en marcha.
Y el resultado de dicho estudio refleja que la legislación y las sanciones relacionadas con el fraude por la manipulación del cuentakilómetros varía mucho de un país a otro: podemos encontrar unos Estados en los que no hay legislación al respecto hasta otros como en Francia donde está penado con una multa máxima de 300.000 euros, y algunos más estrictos como Croacia donde conlleva hasta 8 años de prisión.
La mayoría de los países encuestados aplica multas e, incluso, penas de prisión por el fraude en el cuentakilómetros; en Polonia de hasta 5 años; en República Checa, de hasta 2 años; en Lituania, 2 años; en Italia, 3 años; y en Alemania, hasta 1 año. Sin embargo, estas penas máximas no se suelen imponer, siendo más habituales las multas.
El dinero que pierde el Estado español por los cuentakilómetros trucados
Según CarVertical, en España modificar el cuentakilómetros de un vehículo para uso personal no es ilegal, pero sí se considera un fraude si una persona lo manipula para obtener un beneficio económico directo.
Así, si el comprador de un coche de ocasión detecta que el cuentakilómetros ha sido manipulado deberá presentar una denuncia contra el vendedor. En España, este fraude está castigado con penas de prisión de hasta 3,5 años, y el comprador del vehículo puede solicitar el pago de una indemnización por daños y perjuicios.
En el otro extremo está Francia, donde está prohibido manipular cualquier dato relacionado con el cuentakilómetros, y está castigado por ley con una multa de hasta 300.000 euros y dos años de prisión. Al igual que, en Portugal, que siempre considera un delito de fraude la reducción del kilometraje de un vehículo y puede ser castigado con una pena de prisión de hasta 3 años o una multa.
Para CarVertical la legislación española no atemoriza a los vendedores que rebajan los kilómetros de los vehículos. Y es que el 4,6 % de los coches comprobados en España por esta compañía sufrieron modificaciones en el cuentakilómetros, el 3,3 % en Francia y el 2,2 % en Portugal.
De esta forma, los expertos de CarVertical aseguran que si, en nuestro país, «hubiera una hipotética multa de 3.000 euros por modificar el kilometraje y todos los propietarios de vehículos con fraude en el cuentakilómetros fueran procesados correctamente, España podría recaudar hasta 261 millones de euros al año».
Algo a lo que se suma que los compradores también sufren pérdidas económicas significativas al adquirir vehículos con cuentakilómetros manipulados, pagando hasta un 20 % más sobre el valor real del automóvil. Según la investigación, las pérdidas de los compradores estafados en España superan los 329 millones de euros.
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