Mazda 6: ¿Interesa el nuevo o el antiguo?

Todavía hay unidades del anterior Mazda 6 en los concesionarios. Pero ¿compensa comprárselo por el descuento de 6.000 €? ¿Qué Mazda 6 resulta más interesante hoy por hoy?


La marca japonesa todavía conserva unidades en stock de la anterior generación del Mazda 6, que fue sustituida este año. Para deshacerse de ellas, mantiene una campaña de descuentos en la web www.mazdaoutlet.com, hasta el 30 de junio o hasta fin de existencias.

Todos los Mazda 6 2.2 diésel de 129 CV de 2012 en stock tienen un descuento de 6.000 euros, que se eleva a 7.000 euros si el cliente puede acogerse a la subvención del Plan PIVE-2. Así, un precio inicial de 27.860 euros se queda en 21.860 € para la versión de 129 CV -aunque estas cantidades son orientativas y dependen de las unidades de cada concesionario-. Este motor aún se puede adquirir con cualquiera de los tres acabados: Pulse, Style o Iruka. En el caso del 2.2 diésel de 163 CV, el descuento parte de 7.000 euros para los que no puedan aprovechar el PIVE, con lo que Mazda ofrece un coche de 31.810 euros por sólo 24.810 €. Todas las unidades que quedan con este motor pertenecen al acabado Style +. Un punto positivo de esta campaña es que Mazda no exige ninguna condición de financiación para poder acogerse a estas ofertas.

En Autofácil.es ya te contamos lo que nos parece el nuevo Mazda 6 pero, ¿en qué posición queda si lo enfrentamos a su antecesor en oferta?

¿Dónde gana el Mazda 6 2.2 DE Style antiguo al nuevo?

1. Por diseño: El nuevo modelo es, evidentemente, más moderno y atractivo. También es 12 cm más largo y más aerodinámico –Cx de 0,26 por 0,27 del antiguo-. Asimismo, en el nuevo puedes elegir hasta ocho colores de carrocería -blanco sin sobrecoste o metalizados, desde 520 €-, pero del antiguo -con la carrocería, motor y acabado que aquí se analizan- sólo quedan unidades en stock en gris oscuro y negro. ¿A favor del modelo predecesor? Las unidades que quedan en diesel son del cinco puertas, por lo que resultan más prácticas a la hora de cargar el maletero -en el nuevo, si quieres un portón debes elegir el familiar, que cuesta lo mismo que el 4p-. Gana el nuevo.

2. Por equipamiento: Ambos están bien equipados de serie: incluyen seis airbags, clima bizona, control de velocidad, radio CD Mp3, faros y limpiaparabrisas automáticos, sensor de presión de neumáticos, faros antiniebla o llantas de 17″. El nuevo añade elementos tecnológicos como el arranque por botón o el sistema de frenada de emergencia en ciudad SCBS. Gana el nuevo.

3. Por dentro: Aunque el anterior Mazda 6 es un coche bastante amplio, el nuevo le supera en todas las cotas, especialmente en la altura de las plazas traseras -los pasajeros de más de 1,75 m de alto van mejor en el nuevo- y en el espacio disponible para las piernas de quienes viajan detrás. Sin embargo, el anterior disponía de un maletero de 510 litros, por los 489 litros del actual. La postura de conducción es muy buena en ambos pero, si hablamos de calidad, gana el nuevo modelo, que ofrece plásticos de tacto más agradable, mejores ajustes… Aquí hay empate.

4. Por comportamiento: El anterior Mazda tenía un tacto algo más deportivo debido a que contaba con una amortiguación algo más firme, una dirección ligeramente más precisa, un tamaño exterior más ajustado… El nuevo dispone de una suspensión un poco más blanda y cómoda para los pasajeros. Debido al aumento de tamaño, el actual también se muestra menos ágil que el antiguo modelo. Aquí hay empate.

5. Por bolsillo: Gana por goleada el antiguo Mazda 6 que, con su actual promoción, cuesta 4.620 € menos que su sucesor. Además, las revisiones -que también pasa cada 20.000 km– son ligerísimamente más baratas -las dos primeras cuestan 162,43 y 231,03 €, respectivamente, según datos oficiales de Mazda sin incluir la mano de obra de cada concesionario-. Gana el antiguo.

6. Por motor: Aunque el del antiguo Mazda ya era muy avanzado tecnológicamente -contaba con distribución por cadena, inyección common rail, filtro de partículas…-, el del nuevo modelo suma dos turbos -el anterior, solo uno-. Eso hace que, aunque el antiguo ofrezca 13 CV más, el nuevo tenga más fuerza –38,7 kgm frente a 36,7-, lo que se traduce en una mejor respuesta a bajas rpm -el anterior era algo ‘perezoso’ hasta 1.600 rpm-, unas prestaciones casi calcadas -211 km/h y de 0 a 100 en 9,0 segundos en el nuevo frente a 212 km/h y 9,2 del anterior- pero, eso sí, con un consumo medio 1,2 litros menor en el nuevo. Además, el nuevo motor también es más silencioso y refinado. Gana el nuevo.

Veredicto

El nuevo Mazda 6 es mejor que su antecesor en casi todo… pero si nuestro presupuesto es limitado, la opción de adquirir alguna de las unidades de la anterior generación es tentadora, porque no deja de ser una berlina que se mantiene vigente por amplitud, prestaciones, calidad y seguridad. Si el presupuesto no ‘te alcanza’ para el nuevo, el anterior es una estupenda alternativa. Gana el antiguo.

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