El McLaren F1 es uno de los coches que marcó un antes y un después en el mundo de las cuatro ruedas. Producido en 1993, fue uno de los primeros coches de producción en rozar los 400 km/h. Solo se fabricaron 106 unidades, entre versiones de calle y de competición, y en ellas residía todo el saber hacer de los de Woking, los cuales crearon la máquina definitiva para la carretera y el circuito.
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En este sentido, McLaren Special Operations, en adelante MSO, anunció hace unos meses que iniciaría el proyecto de restauración de un McLaren F1 con número de chasis 63. Tras un largo perdiodo de 18 meses, uno de los iconos más reconocibles de la marca británica ha vuelto a la vida.
Como el McLaren F1 original
El minucioso trabajo de restauración ha tenido como objetivo dejar el vehículo con las mismas especificaciones y acabados que las unidades originales. Así, el F1 fue desmontado y vuelto a montar para comprobar si había piezas en mal estado.
Para el interior, se volvió a usar el cuero Semi Aniline original, que era exclusivo de este modelo, acabado en el color Gris Woking. Tampoco faltó el Alcantara en Gris Woking para el salpicadero y los asientos, con un panel central en color rojo. Elementos como el volante o las alfombrillas fueron reemplazadas, conservándose los originales para la referencia histórica del modelo.
Tras terminar con el habitáculo, todos los elementos de la carrocería se volvieron a montar y a pintar usando el color plata original en un proceso que llevó alrededor de 900 horas.
Un V12 de 618 CV de potencia
El potente motor gasolina atmosférico V12 de 6.1 litros y 618 CV de potencia ha sido reconstruido . Terminado el proceso de ensamblaje, fue sometido a varias pruebas para que la unidad generara la potencia que le permitió alcanzar los 391 km/h.
La parte ciclo del McLaren F1 también fue exhaustivamente revisada. Los amortiguadores se enviaron de vuelta a las instalaciones de Bilstein y los ejes de transmisión se mandaron al proveedor original. El trabajo culminó con la Certificación F1 para que el vehículo pueda demostrar su procedencia.
La restauración se completó en junio después de casi 3.000 horas de trabajo, incluidas las pruebas finales de carretera y pista. Una vez que se completó el trabajo en el chasis 63, fue entregado al propietario en el Centro de Tecnología McLaren en Woking.