1997 —año dorado para la competición automovilística—, supuso el inicio del Campeonato FIA GT, una competición en la que tenían cabida los vehículos más agresivos en términos de diseño, aerodinámica y prestaciones. Con la normativa obligatoria de tener 25 unidades homologadas para la carretera como mínimo, BMW y Porsche ya tenían sus modelos preparados: el excelso 911 GT1 por parte de los de Stuttgart y el superlativo McLaren F1 con motor BMW para los de Munich.
Pero Mercedes-Benz y su departamento de competición y altas prestaciones, AMG, no tenía ningún modelo en activo que pudiera rivalizar con las propuestas de sus compatriotas. AMG trabajó duro durante 4 meses para presentar uno de sus mejores súper deportivos. El CLK GTR se concibió primero como vehículo de competición y después fueron saliendo las 25 unidades homologadas para carretera necesarias para poder competir en el Campeonato FIA GT.
Gracias a su avanzado diseño en términos de aerodinámica y su potente propulsor V12 de 6.9 litros y 630 CV de potencia, el CLK GTR dominó el campeonato, conquistando el título de constructores y pilotos de la mano de Bernd Schneider.
Lo que puedes ver en estas fotografías es la unidad número 9 de las 25 que se produjeron con homologación para carretera, la cual se encuentra en un estado de conservación perfecto, incluyendo la pintura original. Y es que este CLK GTR solo ha recorrido 1.500 km. Incluye también su cofre de herramientas AMG SPS original, manuales de propietario originales, llaves de repuesto originales y botiquín de primeros auxilios. El automóvil también conserva el compresor de aire, el triángulo de peligro y la llave dinamométrica. El precio fijado por RM Sotheby’s es de 4,5 millones de dólares.