Solo han pasado unas semanas desde que Mercedes diera a conocer la renovación de su berlina de tamaño medio, el Clase C, pero la firma alemana no está dispuesta a descansar y acaba de desvelar los nuevos Clase C Coupé y Cabrio. Las variantes de dos puertas reafirman la apuesta de Mercedes por ofrecer una amplia variedad de modelos.
A pesar de su corto recorrido en el mercado, los dos modelos se benefician de algunos de los cambios introducidos en la berlina y el Estate. Cabe recordar que el coupé llegó al mercado a finales de 2015, mientras que el descapotable está disponible desde el verano de 2016, sin embargo, Mercedes ha decidido renovarlos para ofrecer una experiencia de conducción más completa y dotarlos de un mayor atractivo tanto por fuera como por dentro.
Apariencia renovada
A nivel estético, las modificaciones pretenden conseguir una evolución del diseño deportivo, especialmente en el frontal y la zaga, pero también a través de nuevas llantas de aleación y nuevos colores. Cambian los parachoques y la parrilla frontal, que ahora es de efecto diamante. En la parte trasera destacan las dos salidas de escape de los modelos de gasolina.
De la misma forma, los faros delanteros presentan un nuevo aspecto y pueden ser de tipo led High Performance o Multibeam led con luz de carretera Ultra Range como opción. En la zaga, los pilotos también han sido rediseñados y son de tipo led.
Dentro del habitáculo, sobresale el nuevo panel de instrumentos completamente digital con tres estilos diferentes: Classic, Sport y Progressive. También cambian los asientos, algunos detalles decorativos y el catálogo de colores que, desde ahora, cuenta con la opción gris magma/negro. Otra de las novedades es la función de arranque sin llave, que pasa a ser de serie en todos los niveles de equipamiento.
Sistema eléctrico de 48 voltios
Más allá de la parte estética, destacan los nuevos motores de cuatro cilindros dotados con la red eléctrica de 48 voltios, denominada EQ Boost, que ayuda a mejorar la eficiencia y el rendimiento. Se trata del C 200 de gasolina y el diésel C 200 d. El primero rinde 184 CV y, gracias al pequeño motor eléctrico, homologa un consumo medio de 6,1 l/100 km en el Coupé y 6,4 l/100 km en el Cabrio. Por su parte, el C 200 d declara 194 CV y tiene un consumo medio de 4,6 l/100 km en la variante coupé y 4,8 l/100 km en el descapotable.
En el apartado dinámico, los Mercedes Clase C Coupé y Cabrio han visto mejorado su comportamiento de la mano del Dynamic Body Control, un tren de rodaje opcional dotado de una regulación progresiva de la amortiguación en el eje delantero y trasero.
El sistema controla la amortiguación en combinación con las propiedades del motor, del cambio y la dirección, por lo que se adapta a la situación de conducción, a la velocidad y al estado de la carretera. El selector de modos de conducción Dynamic Select también hace posible variar la configuración del tren de rodaje en tres niveles: Sport, Sport+ y Comfort.
Asistentes a la conducción heredados de la Clase S
En cuestión de seguridad, los Clase C Coupé y Cabrio adoptan asistentes a la conducción estrenados por el Clase S. En determinadas situaciones, la Clase C puede conducir de forma semiautónoma a través de los sistemas mejorados de cámaras y de radar, que tienen un alcance de hasta 500 metros. El paquete de seguridad también incluye asistente activo de distancia, de dirección, de frenado activo, de parada de emergencia y para cambio de carril.
En Mercedes tampoco se han olvidado del apartado multimedia y, además del sistema Comand Online, la Clase C puede equipar un nuevo sistema de audio opcional con nueve altavoces y una potencia de 225 vatios que se posiciona entre el sistema de sonido de serie y el opcional de sonido surround firmado por Burmester.