El nuevo SUV de grandes proporciones de Mercedes, el GLE –sustituto del ya extinto ML-, presenta una nueva versión en su gama, con el apellido 450 y la tracción 4Matic. Este motor de gasolina se situará en la oferta mecánica por debajo del GLE 500 y por encima del GLE 400, con 333 y 435 CV respectivamente. En este modelo, el encargado de mover el vehículo será un bloque 3.0 biturbo de 6 cilindros en V y que desarrollará 367 CV.
Para complementarlo, Mercedes ha instalado un cambio automático 9G-Tronic de 9 relaciones con convertidor de par, utilizado también en otros coches de la marca. A su vez, la tracción permanente 4Matic transmite el 40% de la fuerza al eje delantero y el 60% restante al posterior. Los 5 modos de conducción disponibles se dividen en Individual, Comfort, Sport, Sport Plus y Slippery, ajustando este último la tracción de manera inteligente en situaciones de baja adherencia.
Además, el preparador AMG deja patente su huella en detalles cromados y en negro brillante por toda la carrocería, distintivos en el interior y exterior del vehículo y en unas llantas de 20 pulgadas –ampliables hasta las 21 de forma opcional-; combinado todo con un equipamiento que destaca en seguridad y ayudas a la conducción.
