Cómo circular de forma segura y responsable con el patinete eléctrico en ciudad

Nicolás Merino
Nicolás Merino
Bird, empresa del alquiler de vehículos eléctricos compartidos, ha elaborado una práctica guía para circular con cualquier Vehículo de Movilidad Urbana de una manera responsable por la ciudad.


La movilidad compartida en Vehículos de Movilidad Urbana —VMU—, se ha convertido en un fenómeno a nivel internacional y, en poco más de un año, ha llegado a muchas de las principales ciudades del planeta, entre ellas las españolas. Se trata de una alternativa sostenible, respetuosa con el medio ambiente y asequible para realizar viajes cortos en ciudad sin contaminar el aire ni aumentar el tráfico.

Sin embargo, su reciente implantación en algunas ciudades españolas, en las que ya se ha regulado su uso, aún genera dudas sobre cuestiones fundamentales, como por dónde pueden circular y cómo estacionar los patinetes eléctricos. Por eso, Bird, empresa del alquiler de vehículos eléctricos compartidos, propone una serie de recomendaciones para que los usuarios de patinetes eléctricos se muevan de forma segura, tanto para ellos, como para los peatones y el resto de vehículos.

Guía para circular de forma segura y responsable con nuestro patinete eléctrico

  • El casco no es obligatorio, pero sí muy recomendable: aunque el uso del casco no es obligatorio para circular en patinete, es innegable que ofrece una valiosa protección. Siempre es recomendable el empleo del casco, por eso Bird los regala a través de su app para que sus usuarios circulen de la forma más segura posible.
  • Un paseo sin imprudencias ni distracciones: montar en patinete es realmente sencillo, pero su correcto manejo exige llevar siempre ambas manos en el manillar para un mejor control. Y, por supuesto, hay que evitar todo tipo de distracciones, como el teléfono móvil y escuchar música con auriculares.
  • La acera es para los peatones: una de las cuestiones que suscitan más dudas. Y la respuesta no siempre es sencilla, ya que hay numerosas ciudades que todavía no han regulado su uso y, entre las que sí lo han hecho o están a punto de aprobar sus nuevos planes de movilidad, hay importantes diferencias. Sin embargo, lo que sí está claro es que la acera nunca será una opción, puesto que debe quedar reservada sólo a los peatones.
  • El carril bici, la mejor opción para moverse en patinete: hoy por hoy, el carril bici es el espacio ideal para moverse en patinete eléctrico, libre de coches y atascos. No obstante, en ciudades como Madrid, los patinetes también pueden circular por calles (excepto carriles bus) con un límite de velocidad de 30 kilómetros por hora o inferior.
  • La velocidad adecuada es la que se adapta al entorno: la velocidad máxima a la que se puede circular en patinete puede variar de una ciudad a otra, aunque la norma general fija el máximo en 30 km/h. En cualquier caso, no hay por qué circular al límite permitido y lo más recomendable es hacerlo a una velocidad adecuada a la situación de la vía, el tráfico y, muy importante, a la experiencia de quien lleva el patinete. Bird, además, limita la velocidad de sus patinetes a la media de una bici (24 km/h), para mayor seguridad.
  • Un trayecto conocido para librarse de obstáculos: siempre que sea posible, es conveniente elegir una ruta conocida. Es la mejor opción para evitar imprevistos, como calles con alta densidad de tráfico o zonas donde no esté permitido el uso del patinete.
  • Aparcamiento responsable: una de las cuestiones que está generando más debate social es cómo y dónde deben aparcar los patinetes. Una vez más, lo más probable es que la norma no sea homogénea en todas las ciudades españolas cuando regulen el uso del patinete en sus ordenanzas municipales de movilidad. Pero lo que nunca podrá fallar es el sentido común: jamás se debe aparcar un patinete donde suponga un obstáculo para los peatones u otros vehículos.

Observadores, la solución de Bird frente a la polémica del estacionamiento

bird 1

En ciudades como Madrid, la nueva Ordenanza de Movilidad permite estacionar los patinetes en las reservas de motos y aparcabicis, así como en cualquier banda de estacionamiento donde esté permitido aparcar. También, excepcionalmente, en aceras de más de 3 metros que no hayan sido declaradas de ‘especial protección para el peatón’.

Bird cuenta además con un servicio de ‘observadores’, que se encargan de que sus patinetes estén bien estacionados, en zonas permitidas y sin molestar. Los ‘observadores’, además, vigilan que no haya patinetes dañados, y en caso de encontrar alguno no apto para su uso, se encargan de que sea retirado.