Son muchas las multas que se ponen a lo largo del año, pero hay algunas que rozan la locura. Ese es el caso de la sanción que ha recibido un conductor valenciano al aparcar su coche en una plaza normal de aparcamiento delimitada por líneas blancas que, al regresar para cogerlo, había sido señalizada como un estacionamiento reservado para personas con movilidad reducida.
Hay que recordar que tanto pararse como estacionar en una plaza de aparcamiento reservada para personas con movilidad reducida está prohibido. Pero… ¿qué ocurre si acondicionan esa plaza (con una marca sobre el asfalto y una señal vertical) cuando tu coche está ya allí estacionado? Pues esta es la situación que denuncia un vecino valenciano en su cuenta de Twitter.
El conductor del vehículo estacionó un Opel Corsa de su tía, que utiliza su familia como coche auxiliar, en una zona de aparcamiento delimitada por líneas blancas (gratuita) ubicada en la calle Almirante Cadarso, frente al Cine d’Or, en pleno ensanche valenciano.
En Twitter el usuario explica la felicidad que sintió al poder aparcar en ese lugar: “Esto es como acertar la Primitiva porque, desde hace como un año, ya no hay plazas de aparcamiento gratuitas (zona blanca) en el adyacente barrio de Russafa, sino de zona naranja, para residentes con tarjeta. Y en el Ensanche se alterna la zona blanca (gratuita) y la azul (ORA)”.
Hasta ahí todo bien. Sin embargo, ocho días después de haber estacionado su Opel Corsa, el conductor regresó y se encontró con la sorpresa de que ¡habían pintado sobre el asfalto las marcas de plaza para personas con movilidad reducida mientras su coche había estado allí aparcado! Y con asombro se dio cuenta de que tenía en el limpiaparabrisas un boletín de denuncia por estacionar en una plaza reservada.
En una imagen publicada en la cuenta de Twitter de este conductor, se puede apreciar cómo la plaza ha sido modificada, presentando ahora sobre el asfalto el dibujo de una persona en silla de ruedas sobre un fondo azul, junto con la alteración de parte de la pintura blanca que delimita las plazas. Para demostrar que la plaza no existía previamente, el usuario muestra una fotografía en la que se ve cómo el neumático delantero derecho de su coche se ha manchado con la misma pintura utilizada para demarcar la línea blanca.
Multa injustificada
En lo que respecta a la boletín de denuncia, el papel se encontraba en blanco, no especificaba el motivo de la sanción ni los datos del vehículo, únicamente mostraba la fecha de la infracción. En un principio, el usuario pensó que esa multa había sido emitida por la policía local para evitar que le sancionaran.
Para corroborar el estado de la multa, el conductor se puso en contacto con el Ayuntamiento y la policía local de Valencia: “Llamo al @AjuntamentVLC y me pasan con la @policialocalvlc. Les cuento mi triste historia y les doy todo lo que tengo: el número de la multa. Me dicen que no tienen denuncia registrada. Hago una 2a gestión y un amigo que trabaja en el ayuntamiento me lo confirma”.
Sin embargo, a mediados de junio, el conductor recibió la multa con la correspondiente sanción de 200 euros, la cual se reduciría a 100 euros si realizaba el pago dentro de los primeros 20 días. El problema radica en que, al presentar un recurso contra la multa, se pierde la opción de obtener dicha reducción.
En la actualidad, el conductor afectado sólo puede esperar a que se retire la multa por el estacionamiento indebido y así poner fin a esta situación.
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