Conocerás el Subaru XV como un modelo de tipo SUV desarrollado a partir del Impreza y presentado allá por 2011 para ser lanzado en 2012. Luego llegó una segunda generación que sustituyó a la primera en 2017.
Pues bien, esa generación permanece vigente, pero el renovado modelo pasa a llamarse Subaru Crosstrek, denominación que no es nueva, pues es la que se empleaba en EE.UU. y Canadá desde los orígenes del modelo.
El nuevo Subaru Crosstrek mantiene inalterados los pilares del XV. Sigue siendo un compacto ‘levantado’, con muy generosa altura libre al suelo, con un motor bóxer, con tracción total permanente y con transmisión automática por variador continuo.
Desaparece definitivamente la motorización 1.6 de 114 CV y sólo se queda la 2.0, también de gasolina, que se asocia a un sistema de microhibridación que le otorga la etiqueta ECO.
Esta versión ha sido un poco trabajada para intentar suavizar la gran pega de este coche, que es su consumo de gasolina. Así, ahora, por ejemplo la potencia total se reduce a 136 CV (antes 150 CV) sin que eso suponga una merma dramática de rendimiento, pues ahora precisa 10,8 segundos para pasar de 0 a 100 km/h, cuando antes eran 10,7 segundos.
El consumo oficial pasa de 7,9 a 7,7 L/100 km y el motor eléctrico mantiene sus 17 CV de potencia, que a pesar de ser poca se las apaña para mover el coche en modo eléctrico en circunstancias muy concretas, como por ejemplo al maniobrar para aparcar.
En la práctica, suponemos, el lastre de la transmisión de variador continuo y el de la tan eficaz tracción total seguirán jugando en contra de que el consumo sea comedido. Pero bueno, sí es cierto que tanto la suavidad de marcha como las prestaciones de su sistema de tracción total permanente están por encima de prácticamente cualquier rival en el que pienses.
El Subaru Crosstrek mide 4,49 metros de largo (1 cm más que antes), 1,80 metros de ancho y 1,60 metros de alto. Tiene muy buenas cotas todo terreno, por cierto, y además cuenta con diferentes modos de conducción off-road y con control de descenso. Lo malo es el maletero, que se queda en unos escasos 315 litros.
No en vano, es en la seguridad, comandada por el sistema EyeSight de Subaru, en lo que la marca quiere focalizarse. Este sistema agrupa todos los asistentes a la conducción, los cuales, por cierto, han sido revisados para que ofrezcan un funcionamiento más preciso y en un rango mayor.
Estéticamente el lenguaje de diseño permanece intacto, si bien son nuevos los paragolpes, faros, pilotos y determinados colores de la carrocería, así como los asientos o la nueva pantalla central de 11,6″, que crece desde las 8″ de antes. Ello, por cierto, implica la eliminación del display informativo central superior que había antes.
En cuanto a lo que no se ve, Subaru dice haber mejorado la rigidez estructural en un 10% gracias a mejores soldaduras y adhesivos. De momento se desconoce el precio de partida del nuevo Subaru Crosstrek, pero teniendo en cuenta el del anterior XV, podemos esperar que parta de unos 35.000 euros, detalle que será revelado en las próximas semanas.
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