A finales de este mes, en el Salón de Nueva York, podremos conocer el aspecto definitivo del restyling que ha sufrido el deportivo Toyota GT86. Éste incorpora retoques interiores, exteriores y una mejora en su rendimiento gracias a la instalación de una nueva suspensión; mientras, la actual versión seguirá en venta al menos hasta otoño de este año.
Aunque mantiene sus líneas principales, el nuevo Toyota GT86 cuenta con unos paragolpes rediseñados tanto en la parte delantera como en la zaga, que continúa con un difusor en la zona baja con dos salidas de escape integradas. Por su parte, la parrilla frontal ha sido ensanchada y los faros antiniebla laterales se han eliminado, quedando únicamente los delanteros principales, que ahora comprenden también a éstos. Además, la disposición de las luces LED diurnas ha cambiado, y los pilotos traseros son igualmente de este tipo.
En el habitáculo, sin embargo, las modificaciones son todavía más insignificantes, con unas costuras en color gris que contrastan con la tela o la piel negras y el uso de materiales de más calidad tanto en el salpicadero como en los paneles interiores de lar puertas. No obstante, incluye también el logo GT86 en diferentes lugares y su volante deportivo añade los controles del sistema multimedia.
Por último, su propulsor gasolina 2.0 en disposición bóxer incrementa su potencia hasta los 205 CV y su par máximo hasta los 211,5 Nm -estas cifras suponen un crecimiento de 5 CV y 7 Nm-. En cualquier caso, Toyota sigue resistiéndose a la inclusión de un turbo en este motor para mantener intacta su filosofía. Asimismo, la marca promete más sensaciones debido a unos nuevos desarrollos en su caja de cambios manual de seis relaciones.
No llegará solo
Sea como fuere, el nuevo Toyota GT86 estará acompañado en la cita americana por el Toyota C-HR, SUV que fue presentado en el pasado Salón de Ginebra 2016. Utilizará la nueva plataforma TNGA de Toyota y se situará en la gama del fabricante japonés un escalón por debajo del RAV4. Para terminar, su suave caída del techo le otorga cierta imagen de coupé, hecho que se ve acentuado por la ubicación de los tiradores de las puertas traseras -casi en el techo-.