El nuevo Opel Mokka X estará presente en el Salón de Ginebra de 2016, que se celebrará a principios del mes que viene. Y a pesar de lo que pueda parecer, no se trata de ninguna nueva versión del SUV compacto de Opel; simplemente, añade esa X a su nomenclatura. Así, el lavado de cara del Mokka, lanzado en 2012, atañe tanto a su estética como a sus motores -ganarán en eficiencia- y a su equipamiento -más tecnológico-.
Así, lo primero que podemos observar es un frontal renovado, marcado especialmente por una parrilla frontal más amplia y, sobre todo, por unos faros de LED que asemejan más su imagen con la del nuevo Astra, exhibiendo el nuevo lenguaje de diseño de Opel. En los demás aspectos estéticos, podría decirse que es una leve evolución del modelo actual, con un lateral y unos faros muy parecidos a los de éste. Además, añade dos nuevos colores a su paleta: Naranja Ámbar y Rojo Escarlata.
De la misma manera, su habitáculo ha sido rediseñado por completo, habiendo reducido la botonera y siendo prácticamente calcado al del Astra 2016. No obstante, llama la atención que el volante no sea el mismo que el de éste, equipando el que utiliza actualmente. El elemento que sobresale entre todos es una pantalla táctil a color de 7 pulgadas, con conectividad Android Auto y Apple CarPlay y desde la cual se dominan todos los elementos multimedia.
En cuanto al equipamiento, han sido incluidas opciones que mejoran notablemente el confort y lo sitúan como uno de los mejores de la categoría en dotación tecnológica. Por ejemplo, incluye la opción de nuevos faros AFL LED adaptativos inteligentes -reconocen la situación de otros vehículos y peatones, adaptando el haz de luz-, alerta de colisión frontal o cambio involuntario de carril y detector de señales, entre otros.
Por último, en el plano mecánico, el nuevo Mokka X incorpora a su gama un nuevo propulsor gasolina turbo de 1.4 litros que desarrolla 150 CV, con el que homologa un consumo medio de 6,6l/100km asociado a una caja de cambios automática de 6 velocidades y a un sistema de tracción total inteligente. Además, como alternativa diésel existe un 1.6 CDTI que rinde 136 CV que llegó el año pasado, que consume en ciclo combinado 4,7l/100km y registra unas emisiones de 109g/km de CO2.
