Hablar de Nissan, ahora mismo, es hacerlo de crossover, un término que en la propia marca se enorgullecen de haber inventado y que tiene como punta de lanza y gran protagonista al Qashqai. El SUV compacto no sólo ha sido el gran artífice del éxito de Nissan en los últimos años, sino también ha servido de inspiración para que los ingenieros de la marca cambien por completo el concepto de alguno de sus modelos.
Este es el caso del X-Trail; un modelo que hasta principios del pasado año se trataba del típico todoterreno robusto y con claras aptitudes off-road -pese a que no contara con reductora- cuando Nissan decidió darle un nuevo aire. Un reseteo que ha tenido al Qashqai como gran influencia ya que con la desaparición de la variante +2, la marca japonesa centró sus miras en el X-Trail como digno sustituto.
Pero la sombra del Qashqai es mucho más alargada de lo que creemos y tras haber estrenado el motor 1.6 DIG-T de 163 CV, ahora Nissan lo implanta en el X-Trail, con el que pretende conseguir acercarse a un mayor número de usuarios.
¿Cómo? Muy sencillo, ofreciendo un motor que cuenta con un gran comportamiento y, sobre todo, jugando la baza psicológica de que sólo podrá estar asociado a la tracción delantera. Sí, aunque suene descabellado, lo cierto es que los números mandan y según la propia marca, los X-Trail 4×4 sólo suponen el 25% de las ventas del modelo.
Carácter rutero
Pero números y datos al margen, lo cierto es que este 1.6 DIG-T responde a las mil maravillas, tal y como pudimos comprobar por las sinuosas carreteras de los Alpes, ya sea desde un régimen de vueltas inferior a las 2.000 rpm como más allá de las 4.000 rpm, rango en el que los 240 Nm de par máximo hacen acto de presencia. Bien es cierto que si quieres tener algo más de brío, este lo encontrarás a partir de las 3.000 rpm, pero sólo si estás rodando por carreteras secundarias donde, de hecho, tendrás que hacer un poco más de uso de la transmisión manual de seis marchas.
Y eso que una de nuestras primeras preocupaciones era ver cómo solventaba la ganancia de peso con respecto al Qashqai. Sin embargo, los 65 kilos extras que ha de mover nuestro protagonista no suponen ningún esfuerzo. Ahora bien, no será hasta que salgamos a carretera donde veamos el claro hábitat de este propulsor. Al rodar a 120 km/h, el cuentarrevoluciones no sube de las 2.500 rpm, lo que ayuda a que el consumo no supere los 5,5 litros en ningún momento pero si lo combinamos con el recorrido por carretera de montaña, el dato sigue siendo sorprendente pues el gasto medio, real, no sobrepasó los 7 litros.
Gracias a ello, este X-Trail DIG-T se convierte en una alternativa más que viable frente al diesel, combustible que, según Nissan, está en sus horas más bajas; pues nuestro protagonista, a igualdad de equipamiento y tracción es 1.600 euros más barato (sin descuentos incluidos).
