La electrificación de los motores de los coches es un camino del que seguramente ningún modelo podrá escapar en unos pocos años. Ni siquiera si se trata de coches muy potentes con propulsores que históricamente han sido de gasolina.
Uno de los casos que sufrirá una conversión en este sentido en su próxima generación será el Audi RS7, si bien se tratará de una transición ´dulce´. Y es que la siguiente entrega de esta berlina deportiva contará con una alternativa híbrida enchufable, además de con una potente mecánica de gasolina.
La noticia ha sido confirmada por Marc Lichte, el jefe de diseño de la marca de Ingolstadt, en una reciente entrevista. No obstante, no ha desvelado muchos detalles acerca del futuro propulsor híbrido del próximo Audi RS7, pero sí que sabemos que su potencia rondará los 700 CV.
En cualquier caso, lo lógico sería que heredase diversos componentes del Porsche Panamera Turbo S E-Hybrid, lo que implicaría que montaría un bloque de gasolina V8 de 4.0 litros con una fuerza aproximada de 550 CV que se sumaría a la aportada por el motor eléctrico complementario, de unos 150 CV.
En lo que respecta a la versión ´tradicional´, se espera un Audi RS7 con un propulsor de gasolina turboalimentado -montará el mismo doble turbo que el Bentley Continental GT– de 4.0 litros y ocho cilindros en posición de V. Éste desarrollará una potencia de 650 CV y un par motor máximo de 812 Nm, según el propio Lichte.
