Los cambios en el sistema de puntuación del WRC que se han instaurado este año están dando lugar a cosas muy extrañas. Y una la acabamos de ver en el Rallye de Portugal 2024: Sebastien Ogier ha ganado con su Toyota… pero Ott Tanak, segundo con su Hyundai, se ha llevado un punto más que él.
Y no sólo eso: Thierry Neuville, también con Hyundai, ha terminado tercero… y ha sumado sólo un punto menos que Ogier. Todo se debe al sistema de puntuación, que otorga uno puntos a la clasificación de viernes y sábado, pero también permite sumar puntos aparte en la etapa del domingo y, también, añade más puntos a los cinco más rápidos del último tramo.

Todo esto nació para evitar que los equipos se dedicasen a administrar su ventaja a lo largo de la etapa del domingo, algo que restaba interés a la jornada. La idea quizá no sea mala del todo, si bien la regularidad y la gestión de la ventaja son dos aspectos claves en los rallyes que algunos creemos que no se deberían tocar. Pero, independientemente de eso, lo que está claro es que el domingo se reparten demasiados puntos, quitando valor al piloto que logra la victoria.
Pero como esto es y será así durante todo el año, vayamos a lo que sucedido en el Rally de Portugal 2024, que comenzó con una lucha brutal durante los ocho tramos del viernes que acababa con Kalle Rovanperä por delante de sus dos compañeros de equipo, Sebastien Ogier y Takamoto Katsuta. Justo por detrás se situaba el piloto de Hyundai Ott Tanak, y entre los cuatro primeros sólo había 5,4 segundos.

Dani Sordo era quinto con su Hyundai, ya a casi 18 segundos tras algún problema con e sistema hibrido, mientras que Thierry Neuville, líder del Mundial, se colocaba sexto con su Hyundai tras perder tiempo por tener que abrir pista.
Por detrás se situaban Adrien Fourmaux, muy bien con un Ford Puma Rally1 que no parece estar al nivel de los Toyota y de los Hyundai, y de Elfyn Evans, que empezaba a tener un fin de semana de muy mala suerte tras pinchar una rueda y perder el cuaderno de notas, lo que obligaba al copiloto a leer las notas desde una copia que tenía en el móvil.

El sábado, el día de los percances
Toda la lucha que vimos el sábado no tardó en esfumarse el sábado. Rovanpera sufría un fuerte accidente en el segundo tramo, y Katsuta rompía la suspensión de su Toyota tras tocar un talud en el siguiente tramo.
Ogier y Tanak se encontraban solos en la lucha por la victoria, hasta que un pinchazo hacía perder 20 segundos a Tanak que, al final, serían decisivos. Ogier terminaba el sábado líder por delante de Tanak y de Neuville que, pese a varios sustos, se colocaba tercero por delante de Dani Sordo (muy probablemente con órdenes de equipo de por medio…) y de Adrien Fourmaux. Evans se situaba sexto, pensando ya en el domingo para tratar de no perder más puntos.

En la jornada del domingo, se mantenían las posiciones, y Ogier se llevaba la victoria por delante de Tanak y de Neuville. Sordo, que no acababa de encontrar el ritmo en unos tramos con mucha niebla, cedía la cuarta plaza a Fourmaux, acabando el cántabro en quinta posición por delante de un Evans que a punto estuvo de abandonar con problemas de refrigeración.
Tanak se llevaba siete puntos extra por ser el más rápido en la jornada del domingo, y Neuville, segundo más rápido, se llevaba seis. Además, Neuville sumaba otros cinco puntos por ser el más rápido en el último tramo, el Power Stage, tramo en el que Tanak era segundo y añadía otros cuatro puntos que le permiten acercarse un poco en el campeonato.

Neuville, gracias a esto y a los problemas de Evans, ha abierto una pequeña brecha en el campeonato, del que sigue líder, y Hyundai se ha colocado en primera posición en el campeonato de marcas por delante de Toyota. El próximo rally será el Rally de Cerdeña, en Italia, a finales de este mes de mayo.
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