En los años 80 y 90, el Rally Safari del WRC era ‘otra cosa’. Tramos en ocasiones de más de cien kilómetros llamados sectores, por carretera abierta y equipos que llevaban encima de ellos un helicóptero avisándoles de los posibles animales o imprevistos que se pudiesen encontrar.
Un rally así hoy día sería inviable. Por eso, cuando el WRC decidió volver a traer el Rally Safari al Mundial en 2021, lo hizo con un planteamiento muy diferente: tramos como los europeos en cuanto a longitud, cerrados al tráfico… pero duros, muy duros.
Y, en esta edición, hemos vuelto a ver un Rally Safari 2024 especialmente duro, aunque no para todos. Sí lo ha sido para los neumáticos, con numerosos pinchazos, y sí lo ha sido para los Hyundai del equipo oficial, que han ido acusando diferentes problemas durante todo el rally y que, gracias al extraño y polémico sistema de puntuación de seste año, han salvado los muebles con mucha dignidad. Tanto que Thierry Neuville y Martijn Wydaeghe siguen líderes del Mundial.
Pero si hay alguien que ha sabido escapar de los problemas ha sido Kalle Rovanperä. El actual campeón del mundo va a disputar solo algunas pruebas este año, y ésta era la tercera de 2024. Kalle se puso líder desde el primer tramo, ganó casi todos los tramos de la primera etapa y se llevó una clara victoria junto a su copiloto, Jonne Halttunen y su Toyota GR Yaris Rally1.
Por detrás de él, empezó a librarse una dura batalla entre todos los demás pilotos que se fue deshojando poco a poco. Neuville (Hyundai) y Evans (Toyota), que abrían pista, poco a poco se fueron retrasando, mientras que Ott Tanak (Hyundai) se retiraba tras arrancar una rueda y Esapekka Lappi (Hyundai) veía cómo se le rompía el cambio de su i20.
Takamoto Katsuta (Toyota) terminaba la primera etapa a espaldas de Rovanperä y de Evans, y por delante de Neuville y del Ford de Adrien Fourmaux, que a la chita callando va cerrando buenas actuaciones.
En la segunda etapa, los problemas mecánicos se cebaban con Neuville, mientras que un pinchazo retrasaba a Evans y dejaba el podio ya bastante claro.
Así, el domingo veíamos la victoria de Kalle Rovanperä, seguido de Katsuta y de Fourmaux, en un podido que le permite ocupar la tercera plaza del mundial tras Neuville y Evans.
El hecho de que el domingo puntúe de forma independiente al resto del rally, y que también ocurra lo mismo en el último tramo del rally, ha permitido que Tanak, el más rápido el domingo, y que Neuville, el más rápido en el último tramo, hayan sumado casi tantos puntos como Rovanperä.
Así, mientras la victoria del Rovanperä le ha reportado 20 puntos, Neuville ha sumado 19, Katusta se ha llevado 18, Fourmaux 17, Evans 16 y Tanak, 12. Sin duda, demasiado poco botín para quien logra la victoria, a mi modo de ver.
Es cierto que esto da más emoción al campeonato y a los domingos, pero en cierta forma se desvirtúa la competición. Los rallys siempre han sido velocidad, pero también regularidad y saber gestionar la situación. Las dos últimas variables con este sistema, pierden el sentido. Toyota sigue líder en el certamen de marcas.
Por último, en la categoría Rally2 la victoria ha sido para Gus Greensmith, seguido de Oliver Solberg y de Kaito Kajetanowicz, todos con Skoda y este último con uno del equipo cántabro Race Seven. Kajetanowicz ha sido el primero de la categoría WRC2 Challenger.
El próximo rally será en asfalto, el Rally de Croacia, y se disputará entre el 18 y el 21 de abril.
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