Entre sus reclamos figura un precio de partida asequible –14.100 euros– y un diseño, inspirado en el nuevo Seat Ibiza, que destila deportividad y agresividad, pero también robustez al incorporar elementos que le confieren una estética ‘campera’, como los pasos de rueda en plástico negro o las protecciones de los paragolpes. Destaca la posibilidad de pintar la carrocería con una combinación bitono; se puede elegir entre un máximo de 68 combinaciones diferentes, ya sea con techo negro, gris o naranja.
Aunque varía dependiendo del acabado, el interior es algo más discreto, pero lo compensa con excelentes ajustes y un gran aprovechamiento del espacio. Tiene capacidad para cinco pasajeros y, gracias a una carrocería más larga –4,14 m–, más ancha –1,78 m– y más alta –1,55m– que la del Ibiza, presume de una habitabilidad superior. Respecto al modelo utilitario, también aumenta el volumen del maletero, que en este caso alcanza los 400 litros e incluye un práctico doble fondo para ‘esconder’ objetos o separar la carga. La boca que da acceso al cofre es amplia y el suelo queda a una altura ideal para facilitar la manipulación de bultos sin realizar grandes esfuerzos.
![]() Alternativa idealLa oferta mecánica del Arona es muy completa y a lo largo de 2018 se añadirá una opción híbrida que combinará el gas natural comprimido y la gasolina para alcanzar una mayor eficiencia. Podrá lucir la etiqueta ECO de la DGT y utilizará el mismo motor tricílindrico de 1.0 litros del TSI de 95 CV, si bien rebajará la potencia hasta los 90 CV. Con esta combinación, el Seat Arona consigue ampliar de forma más que notable su autonomía. |
Pero lo más destacado dentro del habitáculo es el equipamiento, y es que el Arona puede incluir desde asientos calefactados, hasta un cargador inalámbrico para dispositivos móviles. Precisamente, la conectividad es otra de sus virtudes gracias al sistema Full Link compatible con Apple CarPlay y Android Auto. Tanto el equipo multimedia como el navegador se manejan desde la pantalla táctil multifunción de 8 pulgadas. La experiencia a bordo puede mejorar con el sistema de sonido firmado por Beats Audio -500€-, pero el opcional más recomendable es el paquete de faros delanteros y traseros con tecnología led -600 €-. A la hora de conducir de noche, se agradece la luminosidad extra proporcionada por estos focos que, además, aportan frescura al diseño exterior.
Al volante, el Arona no tiene nada que envidiar al Ibiza y hace gala de un gran dinamismo y un excelente confort de marcha en todo tipo de carreteras. Al igual que su hermano pequeño, utiliza la plataforma modular MQB A0 del grupo Volkswagen, lo cual es toda una garantía, aunque no permite montar un sistema de tracción total.
En cualquier caso, los 19 centímetros de altura libre al suelo se antojan suficientes para realizar alguna que otra escapada fuera del asfalto y la mayor sencillez de la tracción simple hace a que el conjunto sea más ligero y eficiente. La acertada puesta a punto a nivel dinámico se completa con una gama de motores muy variada. En diésel encontramos un 1.6 TDI con dos niveles de potencia –95 y 115 CV– y una brillante relación entre empuje y consumo –4,1 l/100 km en ambos casos–. En gasolina la oferta se amplía a tres propulsores: 1.0 TSI de 95 y 115 CV, y el enérgico 1.5 TSI con tecnología de desconexión de cilindros –homologa 5,1 l/100 km– y 150 CV de potencia.
Todas las mecánicas de 95 CV van asociadas a una caja de cambios manual de cinco velocidades, mientras que los motores de 115 CV emplean una caja de seis relaciones. Por su parte, el 1.0 TSI de 115 CV también puede combinarse con la sobresaliente caja automática DSG de siete marchas.