Seat Ateca: así es el SUV de Seat

Seat Ateca: así es por fuera

Se trata de un todo camino de 4,36 metros de largo, lo que son tan sólo 8 cm más de lo que mide un León. El Ateca adapta todos los rasgos distintivos de la marca española, lo cual se aprecia en la parrilla delantera, en la línea media de la carrocería, en los pilotos posteriores o en los faros, que pueden ser de led en opción. Desde que llegara al mercado en 2016, han ido incorporándose a la gama distintos acabados. En la actualidad, el Ateca se puede combinar con las terminaciones Reference, Style, Style Plus, Xcellence, Xcellence Plus y FR. Todos se caracterizan por distintos acabados exteriores, fundamentalmente relativos a los paragolpes, las llantas, el alerón o los pasos de rueda. Así, por ejemplo, el acabado FR es el más deportivo, con los pasos de rueda pintados en el mismo color que el resto de la carrocería, y con un alerón más vistoso. Por otro lado, Seat anunció en febrero de 2018 el lanzamiento de Cupra como marca independiente y, precisamente, es el Ateca el primer modelo de la nueva marca.

Seat Ateca: así es por dentro

A pesar de que las dimensiones de la carrocería del Ateca no son especialmente grandes en comparación con sus rivales (más bien al revés), el Ateca es un todo camino francamente bien aprovechado por dentro, pues tiene unas de las mejores cotas de espacio de la categoría, especialmente la relativa a la altura disponible para los ocupantes. En el apartado de maletero también destaca, con una capacidad de 510 litros. La ergonomía es otro de los aspectos muy bien resueltos en el Ateca, pues todos los mandos están bien colocados y todos son muy intuitivos de manejar, incluyendo los dos sistemas multimedia disponibles, uno con pantalla de 5″ y otro con pantalla de 8″, siendo este último compatible con Android Auto y Apple CarPlay, además de incorporar la tecnología Mirror Link para replicar la pantalla de un smartphone en la del salpicadero.

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En cuanto a calidad de construcción, el Ateca tiene un aspecto limpio y robusto, si bien no da ninguna impresión de lujo o refinamiento, al menos si lo comparamos con, por ejemplo, un VW Tiguan. Pero los asientos son muy cómodos, todos los plásticos y tejidos son agradables al tacto y, en general, no hay nada que merezca una nota negativa. Asimismo, hay mucho equipamiento tecnológico que el Ateca puede incorporar de manera opcional, como un asistente de frenada de emergencia autónoma, un asistente de mantenimiento de carril, control de ángulo muerto o lector de señales de tráfico.

Seat Ateca: así es su gama de motores

La oferta mecánica del Ateca es bastante amplia, con tres motorizaciones de gasolina y tres diésel, por lo que es difícil que algún cliente no dé con una que le agrade. Eso sí, el problema de la gama Ateca es que no todos los motores pueden combinarse con las diferentes cajas de cambio y tipos de tracción que hay. Así, por ejemplo, los motores 1.0 TSI tricilíndrico de gasolina y 1.6 TDI diésel, ambos con 116 CV, sólo pueden asociarse a cambio manual y tracción delantera. Por encima de estos hay un motor 1.4 EcoTSI de gasolina de 150 CV y un 2.0 TDI diésel de 150 CV. Este último sólo puede ser manual y de tracción 4×4, mientras que el 1.4 EcoTSI nos parece el más interesante de la gama, pues es el único que puede tener todo si el cliente lo desea (tracción delantera o total, y cambio manual o automático). Y, como versiones más potentes, el Ateca ofrece un propulsor 2.0 EcoTSI de gasolina de 190 CV, y un 2.0 TDI diésel de 190 CV. Estos dos motores de 190 CV son los que menos margen de elección dejan al consumidor, pues tienen que llevar tracción total y cambio automático sí o sí.

Curiosamente, la versión 2.0 TDI de 150 CV, que es una de las más exitosas de la gama, sí podía elegirse antes con tracción delantera, pero por alguna razón Seat eliminó de la gama esta combinación. Las cajas de cambio son tres: una manual de seis velocidades, y dos automáticas DSG, una de 6 velocidades y la otra de 7 marchas.

Seat Ateca: así va

El Ateca es uno de los SUV compactos más agradables de conducir porque es casi tan ágil como un Seat León. Además, eso no es óbice para que también sea confortable, silencioso y muy fácil de llevar. La sensación al conducir el Ateca es la de llevar un turismo convencional, pues su suspensión es durita, su dirección es ligera y no se producen en las curvas inercias mucho mayores de las que tienen lugar en un automóvil compacto. Además, el Ateca dispone en opción de la suspensión adaptativa DCC, que reduce la altura libre al suelo en 10 mm y que permite escoger entre tres programas de dureza para los amortiguadores. En cuanto a los motores, todos son válidos para un uso cotidiano. Las variantes de 116 CV sorprenden por su correcto rendimiento y su bajísimo consumo, mientras que las de 150 CV son las más equilibradas a nuestro juicio, ya que viajando con carga son más competentes. Las que nos parecen menos recomendables son las de 190 CV, pues a nivel prestacional no es que exista una diferencia especialmente grande con el escalón inferior de 150 CV, y a cambio el consumo sí es mayor.

• Lo mejor: Conducción muy agradable, extensa gama de motores, espacio interior y maletero.
• Lo peor: La gama sería más interesante si hubiese más facilidades para combinar motores, cajas de cambio y tipos de tracción.

Versión recomendada: 1.4 EcoTSI 150 Style