Seat León TGI: ya se vende el León que funciona con gas natural

Los combustibles como el gas natural comprimido -GNC- o el GLP -gas licuado de petróleo, no confundir con el GNC- pueden ser una alternativa brillante frente al gasóleo y la gasolina, los dos carburantes más utilizados con diferencia en el automóvil. Por eso, y con unos propulsores eléctricos aún en fase de madurez, algunos fabricantes están desarrollando mecánicas que pueden funcionar con gas y que, en países como Italia, logran un volumen de ventas de casi el 50%.

Las cosas buenas…

Si nos fijamos simplemente en los números, está claro que un coche de GNC como el León TGI puede ser una alternativa muy interesante. Pese a ser más caro que sus alternativas diésel y gasolina –con acabado Reference, cuesta 21.310 euros; el TDI sale por 20.780 euros y el TSI, por 18.910 euros-, el hecho de conseguir un consumo medio homologado de 3,5 kg/100 cm hace que sea una simple cuestión de tiempo que comience a ser rentable, pues el kilo de CNG sale a unos 0,98 euros. Es decir, que mientras recorrer 100 km con un León 1.2 TSI 110 te sale por 6,61 euros y por 4,12 euros si se trata del 1.6 TDI 110 -siempre utilizando los datos de consumo homologados-, con el 1.4 TGI de CNG recorrer esos 100 km sale por 3,43 euros.

Además, al volante, no apreciarás grandes diferencias entre conducir este León y uno de gasolina, pues tiene una respuesta similar al 1.2 TSI 110 CV, está igual de bien insonorizado y, a nivel de seguridad, no hay nada que temer: el riesgo de explosión es prácticamente nulo –no ocurre así en el caso de los coches que emplean GLP; en caso de que se produzca una fuga en un lugar cerrado como un garaje, sí podría llegar a producirse una explosión- y repostar es igual de seguro –y de rápido- que hacerlo con un coche de gasolina. Por si fuera poco, disponer del depósito normal de gasolina de 50 litros, asegura una autonomía media de 1.360 km.

… y la cosa mala

¿Cuál es, entonces, el problema para no elegir un coche con GNC? Bueno, creo que en este caso eres tú mismo quien se puede autorresponder: ¿pasas habitualmente por alguna de las 38 gasineras que hay en España y que comercializan GNC? Si tienes esa suerte, adquirir un motor de GNC es la opción ideal siempre que te ‘cuadre’ por potencia o porque sea el coche que quieras. Si no es así, el plan de distribución de estas gasineras aún no está demasiado claro, y tiene pinta de que va a ir muchísimo más lento de lo que este carburante se merece. Además, aún queda una pregunta en el aire. Teniendo en cuenta que el motivo por el que hay tanta diferencia de precio entre el GNC y el gasóleo y gasolina es un tema simplemente impositivo, ¿quién puede asegurar que la Administración no opte por subir descaradamente los impuestos del GNC si, en el futuro, empiezan a proliferar este tipo de motores?