La firma japonesa ha llamado a 185.000 unidades a revisión en todo el mundo, entre las que se encuentran las del Yaris. De ellas, 130.000 son del Vitz -nombre con el que se conoce al Toyota Yaris en Japón-, producidas entre noviembre de 2010 y marzo de 2012, 7.400 en Italia, 7.050 en Alemania y unas 7.000 en Francia. También se ha confirmado que hay unidades afectadas en Estados Unidos y el Reino Unido, y algunos Verso-S fabricados entre agosto de 2010 y el mismo mes de 2011. En España, son 1.201 las unidades afectadas, todas ellas del Yaris. En total, 47.000 vehículos tendrán que pasar por el taller en Europa.
El fallo detectado en la asistencia eléctrica de la dirección podría provocar que de repente el conductor la notara más pesada. El riesgo está en sufrir fugas de agua y que ésta caiga sobre los cables de la dirección, pudiéndose producir cortocircuitos que generan esa sensación de pesadez. La solución pasa por sustituir el módulo de control de la dirección asistida, una operación que Toyota cree que llevará entre una y dos horas en sus servicios oficiales. La marca asegura que no tiene noticia de ningún accidente que se haya producido por este defecto. Cuatro casos dieron la voz de alarma en Europa, pero el problema se nota a bajas velocidades, como al circular por ciudad o cuando se maniobra para aparcar.
Ésta es la quinta llamada a revisión de Toyota en menos de un año, desde que en agosto hubiera que comprobar la suspensión trasera de casi un millón y medio de Auris, Avensis y RAV4. En noviembre, se corrigió en algunas unidades de los Toyota Corolla y Prius un desgaste prematuro en algunas piezas de la dirección.