En esta noticia hemos elegido el Kia Niro híbrido para explicarte algunas cuestiones. Por un lado, si siempre has conducido coches con motor térmico y cambio manual, puede que te preguntes si existe alguna diferencia a la hora de conducir un híbrido, aunque lo cierto es que no tienes de qué preocuparte ya que cualquier vehículo que cuente con algún tipo de electrificación va a ser más sencillo de conducir; además, en el peor de los casos (por ejemplo, un microhíbrido con cambio manual), será igual. Así mismo, puede darse el caso de que ya tengas un vehículo híbrido y no sepas cómo sacarle más partido conduciéndolo de una forma eficiente.
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Así es el nuevo Kia Niro híbrido
En primer lugar, vamos a explicarte cómo es el nuevo Kia Niro híbrido. Nos vamos a centrar en el híbrido tradicional, denominado Kia Niro HEV, si bien es cierto que existe una versión híbrida enchufable (Kia Niro PHEV) y otra 100 % eléctrica (Kia e-Niro). Hablaremos de ellas en otra ocasión. Aquí tienes la prueba del Kia Niro PHEV y la del Kia Niro HEV.
El Kia Niro HEV monta un motor de gasolina de 1.6 litros y cuatro cilindros con 105 CV, que lleva acoplado otro motor eléctrico de 44 CV. Entre ambos, consiguen una potencia de 141 CV. El motor eléctrico lleva una batería ubicada en posición central trasera de 1,32 kWh. Emplea una caja de cambios automática de doble embrague y seis velocidades. Un apunte: que tenga doble embrague no significa que haya un pedal de embrague. Simplemente, es un tipo de caja de cambios automática, similar a las DSG del Grupo Volkswagen.
Por tanto, este Kia Niro se conduce a priori como cualquier otro coche con cambio automático y motor de combustión. Sólo tienes freno y acelerador, y un mando circular en la consola central que hace las veces de palanca de cambios y con el que puedes seleccionar la D (Drive, o marcha hacia adelante), N (Neutro o punto muerto), R (marcha atrás) y P (Parking). Con esto ya puedes circular con tu Kia Niro Híbrido sin ningún problema.
Luego, por si quieres investigar un poco más, hay un botón en el volante denominado Drive Mode que permite seleccionar entre dos modos de conducción: Eco y Sport. El Eco es el que está conectado siempre por defecto. El cambio actúa de modo automático, y no tenemos que hacer nada más que dejar la D conectada para que el coche circule sin mayor problema. Ahora bien, tras el volante hay dos levas que nos permiten modificar el modo de retención del motor.
Por defecto, está en modo Auto, y el coche retiene lo normal cuando dejamos de acelerar. Sin embargo, pulsando la leva izquierda, podemos aumentar ese nivel de retención hasta en tres niveles más, y dejando pulsada esa leva conseguiremos un cuarto punto en el se activa la máxima retención, algo que nos permitirá recargar más las baterías cuando, por ejemplo, bajemos un empinado puerto de montaña.
El nivel de retención en este modo Máx es tan elevado que podremos prescindir en muchas ocasiones de pisar el pedal de freno, si bien no es capaz de detener el coche por sí solo.
Si pulsamos el botón Drive Mode una vez, pondremos el modo Sport. En este caso, veremos que varía la respuesta del acelerador, la dureza de la dirección, el diseño del cuadro de mandos y, además, las levas dejan de actuar sobre la retención del motor y, a cambio, nos permitirán utilizar el cambio de marchas de modo manual.
Es cierto que este tipo de híbridos convencionales pueden recorrer unos 2-3 kilómetros sin gasolina, de forma completamente eléctrica, pero este modo no suele ser interesante salvo que queramos desplazarnos por zonas como garajes donde no queramos que se conecte el motor. Es mucho mejor utilizar la carga de la batería para que el motor eléctrico ayude al de gasolina y así consuma muy poco.
Por último, ten en cuenta que los híbridos puros como este Kia Niro no tienen enchufe y no hay que recargarlos. Es el propio motor de gasolina el que va cargando la batería según va siendo necesario y es la propia gestión electrónica del coche la que va decidiendo qué motor utilizar y en qué medida en función de nuestra conducción, de la velocidad, de la carga de la batería y del modo de conducción.
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