Didi Chuxing, empresa china propietaria de la mayor plataforma de alquiler de coches con conductor del país, y UBER, han alcanzado un acuerdo para fusionar sus negocios y acabar con la dura guerra que mantenían ambas compañías por controlar el mercado chino.
Didi Chuxing nació de una fusión anterior y en su última ronda de financiación logró recaudar 6.500 millones de euros. Sus principales accionistas son Tencent y Alibaba, pero otras empresas como Apple también forman parte del negocio. Didi Chuxing cuenta con aproximadamente 300 millones de usuarios activos y gestiona 14 millones de viajes cada día, un 80% del total que se realizan en China.
Por su parte, UBER no ha dado datos de su actividad concreta en China, pero si es cierto su gran interés por el país oriental. En los dos últimos años, UBER ha gastado hasta 2.000 millones de dólares en China, pero sin lograr los resultados esperados de crecimiento debido a la fuerte competencia de Didi.
Con esta maniobra, Didi Chuxing y UBER crearán una nueva sociedad con un valor comercial cercano a los 31.300 millones de euros. Los inversores de UBER tendrán un 20% de participación en la nueva sociedad y a cambio, Didi Chuxing invertirá casi 900 millones de euros para impulsar el negocio global de UBER.
A todo esto se suma el anuncio de las autoridades chinas con la intención de regularizar los servicios de alquiler de vehículos con conductor, que hasta ahora operaban sin un marco legal claro.