El presidente de la compañía, Martin Winterkorn, afirmó que Estados Unidos «es y continuará siendo» uno de los mercados más importantes para su empresa y subrayó que con el lanzamiento de este todoterreno, la expansión de la planta de Chattanooga y el nuevo centro de desarrollo, la empresa se está concentrando en las necesidades de los clientes americanos.
Por su parte, el presidente y consejero delegado de la empresa en América, Michael Horn, afirmó que la fabricación en este centro del nuevo todoterreno de siete plazas servirá para cumplir con los deseos de los concesionarios, ya que aportará nuevos clientes y crecimiento adicional para la marca.
La compañía, además de invertir en la producción del nuevo vehículo, también instalará en Chattanooga un nuevo Centro de Investigación y Desarrollo y Planificación del consorcio en América. El objetivo de este edificio será identificar la respuesta de los clientes e integrarla de forma más expeditiva en los modelos que se lanzarán. En este centro trabajarán 200 ingenieros.
El nuevo todoterreno se integrará en las estructuras actuales de la factoría de Chattanooga y estará basado en el coche de concepto CrossBlue, desarrollado especialmente para el mercado norteamericano y que fue presentado en el Salón del Automóvil de Detroit de 2013.