El Barómetro del RACE muestra un preocupante ascenso de las averías en carretera, muchas de ellas relacionadas directamente con el mantenimiento o la antigüedad de los vehículos españoles, como lo demuestra el aumento de los problemas con el estado del neumático o fallos graves en el motor.
Los datos estudiados revelan un mayor número de fallos entre enero y mayo de 2015, con una subida del 6,9% respecto al mismo periodo del año anterior. Un dato preocupante: el número de asistencias como consecuencia de un accidente de tráfico se ha incrementado un 5% en los cinco primeros meses del año respecto a 2014, que se suma a una subida del 1,7% de los fallecidos entre enero y mayo, según datos de la DGT. Este aumento de los fallos mecánicos supone un potencial de riesgo que puede empeorar las cifras de accidentalidad si no se renueva el parque de vehículos, manteniendo las ayudas a la compra incluso para vehículos con hasta 3 años de antigüedad, y potenciando su correcto mantenimiento.
Si tenemos en cuenta el total de incidentes por tipo de averías que se produjeron en carretera entre los meses de enero y mayo, los problemas derivados de las baterías y neumáticos ocupan las primeras plazas. Además, a excepción de los problemas de baterías, el resto de averías (neumáticos, bomba de la gasolina, motor, alternador…) han aumentado.
Los problemas con los neumáticos siguen subiendo, como ya se observase en los informes anteriores, lo que constituye un hecho preocupante que afecta directamente a la seguridad. Con más de 20.400 casos, suben un 7% los pinchazos y las roturas de los neumáticos, en la mayoría de los casos causados por el mal estado de las gomas o su mal mantenimiento.
Seguir el plan de mantenimiento recomendado por el fabricante es la mejor garantía de prolongar la vida de nuestro vehículo, mejorando su seguridad y reduciendo el riesgo de averías.
