Ahora que las vacaciones de miles de de españoles están a la vuelta de la esquina, muchos aprovecharán para enganchar sus caravanas, carros tienda o remolques a sus vehículos. Pero conviene recordar que circular con un remolque precisa de práctica y de mucha prudencia a los mandos del vehículo, ya que los errores remolcado uno de estos vehículos pueden tener consecuencias más graves.
Por eso mismo, la Dirección General de Tráfico (DGT) ha querido dar una serie de consejos para que todos los usuarios de remolque conduzcan con la máxima seguridad posible.
Tráfico recuerda que es fundamental adaptar la conducción a las características del remolque, del vehículo o las condiciones de la vía. Y es que estos pueden afectar notablemente a la estabilidad y la seguridad del convoy. Así, en las frenadas, se deberá dejar una distancia considerable respecto al vehículo que nos precede para poder detener el conjunto con seguridad en caso de emergencia. De hecho, la distancia de frenado de un coche que arrastre un remolque aumenta en hasta un 20%, según los especialistas.
Aunque no suele ser muy común, a la hora de adelantar a otros vehículos se deberá tener en cuenta la longitud con el remolque, y por supuesto, la velocidad genérica de la vía. Si el remolque es voluminoso, habrá que tener cuidado con el denominado efecto pantalla que provoca el viento lateral y que empeora la estabilidad del convoy. Si no se está seguro de la maniobra de adelantamiento, lo mejor es no realizarla, ya que puede desestabilizar todo el conjunto y provocar un accidente muy grave.
A la hora de girar, se requiere de una mayor anticipación y adecuación de velocidad. Después, hay que abrir la trayectoria -sin invadir el carril contrario- y evitar hacer giros bruscos para que el remolque no vuelque. “Hay que tener cuidado, porque el remolque empuja, sobre todo si va cargado. Si llegamos ‘pasados’ de velocidad a una curva con un turismo con un remolque perderemos el control, con salida de vía, o vuelco. Y mucho cuidado al frenar una vez iniciado el giro”, advierte Juan Ignacio Serena, jefe de Sección del Área de Formación de Conductores de la DGT.
El viento y velocidad excesiva, los principales enemigos del remolque
Los límites velocidad son menores por una razón: mantener la estabilidad del vehículo. Y es que las turbulencias que se generan con el viento a velocidades de crucero pueden comprometer su estabilidad. Por eso, los vehículos con remolque ligero -hasta 750 kg- tienen limitada la velocidad en autopista y autovía a 90 km/h y a 80 km/h en carreteras convencionales. Para los remolques no ligeros, la velocidad es de 80 y 70 km/h, respectivamente.
Circular marcha atrás es otro de los momentos críticos, especialmente para aquellos conductores sin experiencia en este tipo de situaciones. Lo primero de todo es que el remolque gira al lado contrario del volante. Se debe mover el vehículo con suavidad para evitar que se cruce y se debe iniciar la marcha con los vehículos alineados. Ojo, en función de su anchura, puede precisar de espejos retrovisores suplementarios. Los formadores de conductores recomiendan practicar maniobras en espacios seguros antes de salir a circular, especialmente si se trata de modelos de grandes dimensiones. Y una vez en la carretera, evitar los lugares estrechos hasta que no se haya adquirido cierta destreza.
Si en la ruta hay pendientes, se va a precisar de cierta anticipación, esto es, circulando en marchas cortas en pendientes ascendentes para poder tener potencia suficiente que asegure una velocidad que no sea un peligro para los integrantes del vehículo y el resto de usuarios de la vía. Por contraparte, para bajar se utilizará el freno motor para que el conjunto no se ‘embale’. Por último, para asegurar la máxima estabilidad, es necesario distribuir la carga. ¿Cómo? Se debe concentrar en el centro, que es donde suele estar el eje.
Qué permiso se requiere para llevar remolque
Con el carnet B de coche se pueden llevar remolques ligeros o remolques no ligeros que no superen los 3.500 kg en combinación con el vehículo. En el caso emplear modelos de más de 750 kg en conjuntos de entre 3.500 y 4.250 kg, se precisará de la autorización B96, que además requiere de superar una prueba práctica. Si el conjunto supera los 4.250 kg, entonces se necesita el permiso B+E, que autoriza a llevar una MMA de hasta 7.000 kg. Para ello, es necesario superar una prueba teórica, una prueba de destreza y otra de circulación.
Otras consideraciones importantes a tener en cuenta es que no todos los vehículos son aptos para arrastrar determinados remolques. Para estar seguro de cuánto es capaz de arrastrar un vehículo, se debe comprobar la Masa Máxima Remolcable en la ficha técnica. Y por supuesto, tener instalado un enganche compatible.
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