Los encuentros de los conductores con los Agentes de la Autoridad no resultan muy agradables, seamos sinceros. Si has cometido una infracción y te han ‘pillado’, lo más habitual es que se sitúen detrás de tu vehículo para que te detengas (lee aquí como debes hacerlo si te para la Guardia Civil en carretera)… notificártela y entregarte la correspondiente denuncia.
Pero en otras ocasiones, cualquier conductor puede encontrarse, en cualquier momento y vía, con un control policial. Y la respuesta más habitual es preguntarse si han actuado bien o, si en cambio, han cometido alguna infracción.

Cómo saber que te vas a encontrar un control policial
Encontrarse uno de estos controles es más habitual de lo que uno pudiera pensar, independientemente de que vivas en una gran ciudad o en una zona rural. Lo más habitual es que te encuentres un control de la Policía o de la Guardia Civil si están realizando pruebas de alcoholemia o de detección de drogas, pero también pueden llevarlo a cabo si los agentes están realizando controles aleatorios de documentación, ITV o seguro de los automóviles. El caso más extremo es que los realicen cuando están buscando a algún delincuente.
Sea cómo sea, la Policía Nacional o la Guardia Civil señalizan estos controles en carretera mediante la colocación de conos y señalización vertical en el asfalto que avisan del citado control. Asimismo, es habitual que, en función de la densidad del tráfico o de la capacidad de la vía, utilicen estos conos para reducir el tráfico a un único carril, de forma que puedan limitar la circulación de vehículos en ese tramo y puedan realizar los controles con mayor seguridad.
¿Cómo actuar ante un control policial?
Estos días, la Policía Nacional ha colgado, en su cuenta oficial de la red social TikTok, un vídeo en el que explican cómo debe actuar cualquier conductor ante un control policial. Recuerda que la Policía Nacional tiene autoridad para realizar controles de seguridad mayoritariamente en ciudades, ya que el control de tráfico en carretera está encargado a la Guardia Civil.
En el vídeo, que puedes ver a continuación, un agente de la Policía Nacional explica que, cuando veas el control, deberás reducir “la velocidad progresivamente y seguir las indicaciones del agente”. Además, explica que “si [el agente] levanta el brazo verticalmente, te está indicando que debes detenerte”. Al respecto la policía aconseja que pares “el vehículo lo más cerca posible del agente, manteniendo una distancia de seguridad que no le ponga en peligro”.
Una vez te hayas detenido, este organismo explica que “sin quitarte el cinturón de seguridad y sin bajarte del vehículo sin que te lo digamos”, deberemos seguir las instrucciones de los agentes: “baja la ventanilla y muéstranos tu documentación». Otra recomendación de los agentes es que se coloquen “las manos a la vista: un buen sitio es el volante”. La Policía Nacional recuerda además que, si es de noche, es “aconsejable encender la luz interior del vehículo”.
En última instancia, recomiendan que no te pongas nervioso, incluso si te solicitan que salgas de tu coche o te bajes de tu moto: “si te indicamos que te bajes del vehículo, mantén la calma, sólo será un momento hasta que hagamos las comprobaciones”.
Estos consejos son muy similares a los que, hace meses, publicó la Guardia Civil a través de su cuenta oficial en Twitter: puedes leerlos aquí.

Control policial: si te lo saltas, 200 euros y retirada de 4 puntos
Y ojo, jamás se te ocurra tratar de saltarte un control policial, con independencia de que lo haya instalado la Policía Nacional o la Guardia Civil. Además de que someterte a estos controles es obligatorio según la Ley, podrías causar un accidente.
En concreto, la norma sanciona con 200 euros y la retirada de 4 puntos el hecho de “no respetar las señales y órdenes de los agentes de la autoridad encargados de la vigilancia y regulación del tráfico”. Pero recuerda que si causas un accidente, y en función de la gravedad del mismo (si hay víctimas) o de tus circunstancias (si conducías bajo los efectos del alcohol o drogas), podrías ser condenado incluso a penas de prisión.
