Las modas, las tecnologías, las necesidades… En ocasiones, el éxito o el fracaso de un modelo depende de que esté en el momento adecuado en el lugar adecuado. Aquí tenemos cuatro modelos de absoluto éxito en sus respectivas categorías que han visto caer su reinado, y en breve dejarán de existir.
Ford Fiesta
Cuando llegó al mercado hace ya casi medio siglo, el Ford Fiesta se convirtió en un icono. Era un coche asequible y sencillo, pero capaz de solucionar muchos problemas de movilidad a multitud de personas en su época.
El Ford Fiesta fue uno de los coches más queridos durante muchos años. Sin embargo, el segmento de los urbanos cada vez va perdiendo más peso en favor de los SUV’s de unos 4,00 metros de largo, como el propio Ford Puma.
Eso, unido al cambio de estrategia de Ford de cara al futuro, ha hecho que el Ford fiesta haya dejado de fabricarse para siempre desde hace ya unos meses. Sin embargo, aún quedan unidades en stock, de manera que aún puedes hacerte con uno completamente nuevo.
Quizá haya un Ford Fiesta dentro de unos años pero, si lo hay, ya será otra cosa. El concepto actual del Ford Fiesta morirá cuando se matricule las últimas de sus unidades ya fabricadas.
Peugeot 3008 Diésel
La apuesta por la electrificación y la hibridación, así como las cada vez mayor complejidad técnica de los motores diésel para cumplir con las restricciones, ha hecho que muchos fabricantes empiecen a dejar de lado los motores diésel, incluso en como como el Peugeot 3008, un tipo de vehículo en el que aún podría seguir siendo una mecánica recomendable para quienes fueran a viajar por carretera, principalmente.
Sin embargo, no habrá más diésel ya en el Peugeot 3008. La gama estará formada sólo por motores de gasolina, híbridos enchufables y, sobre todo, se espera que la nueva mecánica híbrida de 136 CV suponga quien se lleve la mayor parte de sus ventas.
Y, aunque quizá en carretera no sea más prestacional, está mecánica será más que suficiente para mover al Peugeot 3008 con dignidad, en ciudad será más eficiente, tendrá etiqueta Eco de la DGT y, desde el punto de vista de la fiabilidad y del mantenimiento, también parece más interesante, al menos en teoría.
Volkswagen Touran
Los monovolúmenes. Hace 20 años, estos modelos experimentaron un increíble boom que les llevó a estar por todos los lados. Las marcas monovolumizaban todo y, en cierta forma, fue rentable. Pero he ahí que llegó el Nissan Qashqai y las marcas se dieron cuenta de que ese formato SUV empezaba a resultar más atractivo para el cliente… y más rentable para ellos.
Los monovolúmenes empezaron a desaparecer al tiempo que florecían SUV’s de todos los tamaños por doquier, hasta llegar al momento actual. El Volkswagen Touran era uno de los pocos monovolúmenes que aún aguantada el tirón, pero de nuevo los SUV´s y la apuesta de electrificación de la marca dejan a las claras que el formato monovolumen no tiene hueco en su gama.
En 2024, el Volkswagen Touran dejará de comercializarse 21 años después de su nacimiento.
Renault Mégane R.S.
Los deportivos de gasolina son una de las especies en extensión, sobre todo aquellos creados sobre modelos de tipo urbano o compacto y que no sean de marcas generalistas. A finales de los 90, Renault presentó el Renault Clio Renault Sport, equipado con un motor 2.0 16V de 172 CV.
Desde entonces, Renault Sport comenzó a elaborar las versiones más deportivas y radicales de sus modelos de calle, además de los de competición, centrados principalmente en el Clio y en el Mégane, y en ocasiones también conocidas como RS o R.S. Ahora, Renault va a dejar de comercializar todas sus creaciones de Renault Sport, y de hecho ya ha puesto a la venta el Renault Mégane R.S. Ultime, una edición limitada del Mégane que supondrá el fin a más de veinte años de estupendos deportivos en formato urbano y compacto.
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