Por primera vez, Hyundai da uso con este motor al ciclo Atkinson –que fomenta el ahorro de combustible mediante la reducción de pérdidas de bombeo al alargar el cierre de la válvula de admisión- y al sistema EGR –recirculación de gases de escape de vuelta al cilindro, donde se queman-. Además, el consumo de combustible se ha conseguido reducir en un 3% gracias a este último procedimiento, con más de un 20% de gases extraídos, un refrigerador de EGR con una eficiencia del 98% y una válvula cuyo tiempo de respuesta es de 56,9 milisegundos.
Del mismo modo, la fricción y la detonación disminuyen por la diferenciación de temperatura entre el termostato del bloque de cilindros -105 grados- y culata -88 grados-, calentándose rápidamente el primero y manteniéndose la segunda a la graduación más baja posible para reducir las detonaciones. Igualmente, la presión máxima de 200 bar asegura también una combustión limpia y menor nivel de emisiones y de gasto de combustible para un propulsor que desarrolla 105 CV y 147 Nm de par motor máximo.
Nueva caja automática de 8 velocidades
Las novedades no se acaban ahí, pues este nuevo motor llega conjuntamente con una nueva transmisión automática de 8 velocidades que reduce el consumo en un 7,3% en comparación con la actual de 6 relaciones. Del mismo modo, es 3,5 kg. más ligera y garantiza una mayor aceleración a bajo régimen y una disminución de NVH debido a la adición de otro embrague y de dos marchas más.
Las fugas de aceite son también disminuidas, al igual que aumenta la estabilidad, gracias a que el control del solenoide del embrague se lleva a cabo directamente –en lugar de por medio de varias válvulas-. Asimismo, la bomba de aceite es de nuevo diseño, y un control del embrague del amortiguador mediante 4 discos independientes potencia el intervalo de bloqueo y la respuesta del control del amortiguador.
Por último, la pérdida de fricción se ve mejorada por un nuevo diseño de los patrones de las ranuras que reduce la resistencia aerodinámica, una placa deflectora que minimiza la pérdida de aceite y una rebaja de las áreas de contacto de los rodamientos de bolas que incrementa la eficiencia de la propulsión. Todo ello hacen que esta caja esté dirigida al segmento premium, se integrará en las familias de motores R, Lambda y Theta turbo GDi.
