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Nuevas motos camufladas de la DGT: qué son, cómo identificarlas y cuándo multarán

La DGT utiliza todo tipo de medios para pillar a los infractores: drones, helicópteros... y ahora se suman las nuevas motos camufladas.

Desde hace tiempo se habla de las motos camufladas de la DGT, pero en 2024 es cuando parece que ya serán una realidad que podremos ver por las carreteras españolas. De esta forma, la Dirección General de Tráfico (DGT) sumará a sus métodos de radares y multas con los que pillan a los conductores infractores uno más, que seguramente será muy efectivo debido a que resultará difícil de identificar.

Y es que las motos camufladas de la Guardia Civil llegarán en verano de 2024, según ha asegurado el director General de Tráfico, Pere Navarro, en una entrevista publicada recientemente por El País; aunque no ha especificado una fecha en concreto. Pero cómo serán estas motos y, sobre todo, cómo podremos identificarlas.

¿Cómo serán las motos camufladas de la DGT?

Las motos camufladas de la Guardia Civil serán motos de gran cilindrada; los dos modelos que se han podido ver ya circulando por las carreteras españolas son la BMW R1150 RT y la Honda ST 1300, tal y como indican desde el medio de comunicación El Español. 

Además, estas motos camufladas de la DGT suelen tener colores discretos como, por ejemplo, el gris. Así mismo, y como es de suponer, estas motos no llevarán ningún distintivo de la Guardia Civil, por lo que su identificación resultará más complicada.

¿Qué infracciones persiguen las motos camufladas de la DGT?

Las motos camufladas de la DGT se utilizarán principalmente los fines de semana y en las zonas donde haya más complicaciones en cuanto al tráfico porque se produzcan un mayor número de accidentes, ha apuntado el director General de Tráfico.

Las principales infracciones que los agentes de las motos camufladas de la Guardia Civil perseguirán serán estas dos: las del uso del teléfono móvil al volante y los excesos de velocidad.

En el caso del uso del móvil mientras se conduce conlleva una sanción de 200 euros y la pérdida de seis puntos del carnet de conducir. Mientras que las multas por exceso de velocidad pueden llegar a alcanzar hasta los 600 euros y la retirada de seis puntos del permiso.

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No obstante, estas motos camufladas de la DGT también serán capaces de vigilar otro tipo de infracciones como, por ejemplo, el consumo de alcohol y drogas. De esta forma, si el agente de Tráfico percibe que un conductor puede estar bajo los efectos del alcohol y las drogas al volante, podrá solicitar las pruebas necesarias para comprobarlo. Las multas por dar positivo en un control de alcohol o drogas son las siguientes:

  • Cuando la tasa de alcohol en aire espirado se sitúa entre 0,25 mg/l y 0,50 mg/l (entre 0,15 y 0,30 mg/l para noveles y profesionales), la multa es de 500 euros y la retirada de cuatro puntos en el carnet de conducir; si el conductor es reincidente, la multa será de 1.000 euros.
  • Si la tasa de alcohol en aire espirado supera los 0,50 mg/l (0,30 mg/l para noveles y profesionales), la sanción es de 1.000 euros y la pérdida de seis puntos en el permiso de conducir.
  • Si se supera la tasa de alcoholemia de 0,60 mg/l en aire espirado, la infracción administrativa pasa a considerarse un delito contra la seguridad vial castigado con penas de prisión de tres a seis meses, multa de seis a 12 meses, o trabajos en beneficio de la comunidad de uno a tres meses; además, se perderá el carnet de conducir durante un periodo de entre uno y cuatro años.
  • También se considera una infracción muy grave, el negarse a someterse a un control de alcoholemia y se establecen penas de prisión de seis meses a un año, y la retirada del carnet de conducir de uno a cuatro años.
  • En cuanto al consumo de drogas al volante, la multa por dar positivo en un control de drogas es de 1.000 euros y la pérdida de seis puntos del permiso de conducir. Aunque, si se conduce bajo la influencia de drogas tóxicas, estupefacientes o sustancias psicotrópicas, el conductor se enfrenta a un delito castigado con una pena de prisión de tres a seis meses, multa de seis a 12 meses, o trabajos en beneficio de la comunidad de uno a tres meses; además de la retirada del carnet de conducir por un periodo que puede ir desde uno hasta cuatro años.

La DGT ya probó las motos camufladas hace tiempo…

Las motos camufladas de la Guardia Civil no son algo nuevo, puesto que ya se utilizaron en el verano del año 2022 cuando dentro del dispositivo de la Operación Salida de ese año se incorporaron 34 motos camufladas durante los fines de semana para controlar, sobre todo, comportamientos indebidos y con el objetivo de reducir la siniestralidad (sobre todo en carreteras secundarias).

Estas motos camufladas de la DGT formaron parte de una prueba piloto y circularon por las carreteras de mayor siniestralidad de motoristas con el objetivo de reducir la siniestralidad y comprobar que se hacía una conducción responsable. Así mismo, las motos camufladas se dejaron ver en 2023 por Galicia controlando el tráfico en las principales rutas moteras de esta comunidad.  

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