Durante los últimos tiempos no es extraño ver cómo varios cuerpos de policía del mundo incorporan a sus flotas auténticos superdeportivos ´disfrazados´ con los vinilos de las fuerzas del orden. La última incorporación de la policía alemana no es precisamente un superdeportivo, pero es tan ´bruto´ que por bien podría serlo por prestaciones. Se trata de un Volkswagen Golf R preparado especialmente por los alemanes de Oettinger.
Este modelo, que en su versión ´estándar´ tiene una potencia de 310 CV, ha sido el elegido por la organización del Salón de Essen, un evento en el que se exponen multitud de vehículos ´tuneados´, para representar a la ley germana dentro del proyecto Tune it Safe! -´tunéalo´ con seguridad-. En años anteriores los elegidos han sido coches tan espectaculares como un Chevrolet Corvette Stingray o un Ford Mustang.
Sea como fuere, el nuevo Volkswagen Golf R preparado por Oettinger especialmente para la policía de Alemania dispone, además de la decoración específica del cuerpo, de unas llamativas llantas de aleación con un tamaño de 20 pulgadas ´envueltas´ en unos neumáticos Hankook Ventus S1 evo2 de ultra altas prestaciones -UHP- en medida 235/30, marca que también ha querido colaborar con la transformación de esta unidad.
Asimismo, cuenta con diversos elementos especiales que adornan -funcionalmente, mejorando la aerodinámica- su carrocería, como un splitter frontal, un spoiler trasero situado en el techo, unas salidas de escape deportivas con 90 mm de diámetro o unas taloneras laterales. En cualquier caso, lo más interesante se encuentra bajo el capó: se ha aumentado la potencia hasta los 400 CV, lo que le permite acelerar de 0 a 100 km/h en 3,6 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 290 km/h.
