Hay coches que, lejos de perder valor con el tiempo, son como el buen vino y mejoran con los años. Es algo que le debería ocurrir al Porsche 911 R, una versión especial de la actual generación del deportivo alemán que costaba nuevo -las 991 unidades disponibles se agotaron nada más ponerse a la venta- aproximadamente 165.000 euros. Lo cierto es que desde este mismo momento se ha creado una burbuja en torno a este modelo.
Por ejemplo, en Reino Unido hay una unidad a la venta que supera en algo más de seis veces su precio de venta inicial, ya que está anunciado por unos 957.000 euros al cambio. En los Estados Unidos, no obstante, han ido más allá, y ya están pidiendo por un 911 R de segunda mano la friolera de aproximadamente 1.137.000 euros al cambio. Sin duda, es una buena oportunidad para los coleccionistas que se quedaron sin el suyo cuando Porsche lo vendió como nuevo.
Pero, ¿qué lo hace tan especial? Pues, esencialmente, es un Porsche 911 GT3 homologado para circular por la calle. Monta un propulsor bóxer atmosférico -y, por lo tanto, en peligro de extinción- de 4.0 litros y seis cilindros que entrega una potencia de 500 CV. Todo ello combinado con una transmisión manual de seis relaciones, aspecto en franca decadencia en beneficio de las cajas de cambio automáticas.
