Las primeras fotos espía del próximo Land Rover Discovery, al que se espera para finales de 2017 como versión 2018, han salido a la luz gracias a los compañeros de Motorauthority, que han fotografiado al futuro modelo en marcha y con mucho camuflaje encima. Este será el segundo vehículo de la nueva familia Discovery, después de la llegada este año del Sport, y estará asentado sobre la nueva plataforma de aluminio de la marca llamada PLA, haciéndolo más dinámico y eficiente.
Sus rivales más directos serán el BMW X5 y el Mercedes-Benz GLC, y para destacar frente a la competencia llegaría con 7 asientos de serie, además de sus consabidas capacidades offroad. Por tanto, sería lógico también que integrase en su dotación básica diferentes cámaras y sensores y un Head Up Display. Asimismo, opcionalmente vendría con faros láser capaces de analizar las irregularidades del terreno, así como de reconocer las señales de tráfico.
La versión encargada de abrir una gama, que a buen seguro contará con un modelo híbrido, sería un diésel de 2 litros y 4 cilindros asociado a un cambio automático de 8 relaciones –de serie en todos los acabados-.