A mitad de su vida comercial, el Mercedes Clase C acaba de recibir un restyling para renovarse por completo. La actualización afecta a toda la gama e incluye modificaciones a nivel de diseño, mejoras sustanciales en cuestión de equipamiento y mecánicas más eficientes, como el nuevo C 200 de gasolina con tecnología híbrida ligera o el Mercedes-AMG C 43 4MATIC, que ahora es más potente y logra reducir las cifras de consumo y emisiones. Para conocer todos los cambios, hemos viajado hasta Luxemburgo y nos hemos puesto al volante de todas las variantes.
Más allá de las mejoras de equipamiento y mecánicas, el Mercedes Clase C 2018 muestra una imagen ligeramente remozada, si bien los cambios son mínimos y mantiene el estilo del modelo anterior. Las principales modficaciones se concentran en el frontal, que estrena un paragolpes más agresivo, la parrilla diamantada de la marca y nuevos faros; de serie, las luces delanteras son LED High Performance y, opcionalmente, incorporan tecnología Multibeam LED con luces largas Ultra Range para mejorar la calidad y el alcance del alumbrado, que en este caso es de 650 metros. En la parte trasera también cambian los grupos ópticos y, gracias a la tecnología led, dibujan una nueva firma luminosa.
Mercedes Clase C 2018, así es por dentro
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Dentro, también hay novedades, aunque el diseño y la disposición de los mandos se mantienen inalterados. Lo más destacado es la instrumentación digital con pantalla de 12,3″, que es opcional y permite personalizar las diferentes visualizaciones disponibles. El nuevo cuadro de mandos se complementa con la pantalla táctil flotante del salpicadero, que puede tener 7″ o 10,25″; desde este panel se puede controlar el sistema de infoentretenimiento, el navegador o diferentes parámetros del vehículo. El Head-Up Display opcional también mejora la calidad de las proyecciones en el parabrisas y otra de las modificaciones afecta al volante multifunción, que ahora es idéntico al del Mercedes Clase S e incluye mandos táctiles para manejar la instrumentación digital y el sistema multimedia. En términos generales, tanto la calidad de los materiales, como sus ajustes, son algo mejores, pero siguen sin ser tan buenos como los de sus principales rivales y, sin ir más lejos, el nuevo Mercedes Clase A está mejor acabado.
Si hablamos de equipamiento, además de los elementos mencionados, todos los Clase C incorporan de serie siete airbags, asientos delanteros confort con algunos ajustes eléctricos, Bluetooth, cámara trasera en los Estate, Coupé y Cabrio, climatizador bizona, portón trasero automático en el Estate, control y limitador de velocidad, equipo de audio con pantalla de siete pulgadas, el paquete de iluminación interior con luces de ambiente led, los citados faros LED High Performance, el depósito de combustible de mayor capacidad -66 litros-, freno de mano eléctrico, llantas de aleación de 17 pulgadas (18 en los AMG), doble puerto USB, selector de modos de conducción DYNAMIC SELECT, sensor de lluvia y tren de rodaje AGILITY CONTROL. En materia de seguridad destaca el servofreno de emergencia activo, el detector de fatiga ATTENTION ASSIST, el capó activo para la protección de los peatones y la llamada de emergencia SOS.
Mercedes Clase C 2018: así va
En el plano mecánico, todos los motores están asociados a una transmisión automática de nueve velocidades 9G-TRONIC y han recibido una puesta a punto para cumplir con la normativa de emisiones Euro 6d temp, así como para mejorar su rendimiento. Las variantes de acceso siguen siendo el C 180 de gasolina con 156 CV y, en diésel, el C 200 d de 150 CV que, al igual que el C 220 d de 194 CV, es nuevo y proviene del Clase E. El nuevo bloque es muy frugal y, en el caso del C 220 d, permite optar por la tracción integral 4MATIC, pero la sonoridad y el refinamiento siguen siendo sus asignaturas pendientes y está lejos de igualar la finura ofrecida por los propulsores de gasolina.
Pero la mayor novedad es el C 200 de gasolina dotado con un sistema EQ Boost y un sistema eléctrico de 48 V, lo que le convierte en un híbrido ligero. El bloque de gasolina, que tiene 1.5 litros y rinde 184 CV, se complementa con un pequeño alternador arrancador de 10 kW accionado por correa que proporciona 14 CV adicionales en momentos puntuales, como adelantamientos o recuperaciones. Este sistema también ayuda a arrancar el motor de combustión con mayor celeridad y permite circular «a vela» con el bloque de gasolina completamente apagado. En marcha, es difícil percibir el empuje extra del motor eléctrico, si bien las prestaciones son buenas, aunque, en la práctica, es difícil obtener medias de consumo por debajo de los 7,5 l/100 km en conducción mixta. Gracias a este sistema, eso sí, el C 200 tiene la etiqueta Eco de la DGT y puede circular y aparcar en el centro de las grandes ciudades en episodios de restricciones al tráfico a consecuencia de la contaminación.
Por encima del C 200, se ofrece el C 300 de 2.0 litros, cuatro cilindros y 258 CV y, como novedad, el Mercedes-AMG C 43 4MATIC biturbo de 3.0 litros y seis cilindros incrementa su potencia hasta los 390 CV -23 CV más que antes-. Con cualquiera de las cuatro carrocerías disponibles, el C 43 4MATIC muestra un perfecto equilibrio entre deportividad y confort, ya que, a pesar de ser menos potente que el C 63, resulta más equilibrado para un uso cotidiano y sus consumos son sensiblemente inferiores. Su sonido tampoco es tan atronador como el del V8 de su hermano mayor, pero sí resulta más atractivo y, en el modo de conducción Sport+, sorprende con adictivos «petardeos», al menos con el escape AMG Performance que equipaban las unidades de pruebas.
Mercedes Clase C 2018: Precios
El precio de partida del nuevo Mercedes Clase C es de 38.200 euros para el C 180 berlina, mientras que el C 200 asciende a 44.500 euros y el C 300 está disponible desde 49.250 euros. El diésel C 200 d tiene una tarifa base de 42.850 euros y el C 220 d arranca en 45.950 euros, en el caso de incorporar la tracción 4MATIC cuesta 49.400 euros. El Mercedes-AMG C 43 4MATIC está disponible desde 74.000 euros. Las variantes con carrocería familiar Estate cuestan 2.000 euros más que el sedán; el C Coupé tiene un precio de partida de 45.800 euros y el Cabrio está disponible desde 53.750 euros.
