Así va el Skoda Octavia 1.4 TSI 140 CV DSG 2015

Y es que, con 4,66 m de longitud y un diseño conservador pero atractivo, el Skoda Octavia 2015 ofrece un interior amplio para cinco ocupantes, que destaca por el espacio para las piernas y altura disponible en las plazas traseras: en ellas, dos adultos de hasta 1,85 m viajarán muy cómodamente, si bien la plaza central queda reservada a un niño, debido a que es más estrecha y el espacio para los pies se ve penalizado por un túnel de transmisión. Mientras tanto, en las plazas delanteras, el conductor tiene acceso a un puesto de conducción bastante logrado, con todos los mandos situados a mano y que resultan intuitivos.
Además, y aunque la calidad percibida de materiales y acabados es, lógicamente, inferior por ejemplo, a la de un VW Passat o un Ford Mondeo, no defrauda, sino más bien lo contrario, con plásticos agradables al tacto y a la vista y buenos ajustes. El Octavia es, eminentemente, un coche funcional, pero no por ello deja de cuidar a su conductor.

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Y si el interior es destacable, no lo es menos el motor turboalimentado 1.4 TSI. Lo hemos podido probar en otros vehículos del Grupo VW -por ej., en el Seat León tiene 125 CV- y siempre nos ha parecido muy recomendable por su suavidad de funcionamiento y entrega progresiva de potencia. Además, unido a la caja automática DSG, de funcionamiento rápido y preciso -aunque todavía resulta ligeramente brusca a la hora de aparcar-, consigue una respuesta casi inmediata? y unos consumos bastante contenidos. De hecho, a lo largo de nuestra prueba, realizada aprox. la mitad por vías urbanas y la otra mitad por vías rápidas y carretera, el ordenador de a bordo marcó un consumo medio de 6,9 l/100 km. Por lo demás, la dirección es precisa y de tacto pesado, fácil de manejar; la suspensión resulta firme, pero no es incómoda -incluso en la unidad de pruebas, que calzaba unos neumáticos 225/45/R18-; y el chasis se muestra ágil, lo adecuado para un vehículo de este tamaño: no es ideal para abordar curvas en un puerto de montaña, pero sí es capaz de ir rápido y ofrecer confianza al conductor. También sorprende por la baja sonoridad que se percibe en el habitáculo al rodar, algo que, sumado a su estabilidad y aplomo, hace que sea fácil encontrarse circulando por encima de la velocidad deseada sin percatarse de ello más veces de la cuenta.

Pero uno de los aspectos en los que más destaca el Skoda Octavia 2015 es en el tamaño del maletero. Pese a que la carrocería asemeja un diseño de 4p, ofrece un único portón como sistema de apertura. Una vez abierto, da acceso a un enorme hueco portaequipajes de 590 l de capacidad, de formas cuadradas y que, en los laterales, incluye una práctica toma de corriente y dos resistentes ganchos, ideales para colgar bolsas sin que su contenido se desparrame por el maletero. Si aún necesitamos más maletero, cabe recordar que el respaldo de los asientos traseros se puede abatir, de forma que queda casi un fondo plano y una capacidad de 1.580 litros, equivalente a una docena o más de maletas grandes.