La firma japonesa Toyota acaba de desvelar en el tecnológico CES de Las Vegas 2017 -el cual, por cierto, cada año presenta más novedades relacionadas con el mundo de la automoción- un nuevo prototipo denominado Concept-i. Se trata de un coche que representa un gran paso adelante en cuanto a seguridad y sostenibilidad en la conducción autónoma. Y es que el Toyota Concept-i hace uso de la inteligencia artificial mediante un sistema llamado ´Yui´, que será capaz de interactuar con el conductor y, a su vez, monitorizar todo lo que ocurre en la carretera.
Toyota ha expresado su objetivo: reducir casi a cero los más de 35.000 accidentes de tráfico que ocurren en tan solo un año en Estados Unidos. Esencialmente, lo que buscan es que con ´Yui´ no pueda haber un choque. Para ello, ´Yui´ se valdrá de dos sistemas, ´Chauffeur´ y ´Guardian´. El primero se encargará de dirigir el vehículo; mientras tanto, ´Guardian´ ha sido desarrollado para dominar de una manera más eficiente e inteligente las ayudas a la conducción ya presentes en los modelos actuales, como el control de crucero activo o el sistema de mantenimiento de carril. Además, aprenderá continuamente a través de su experiencia y de los datos compartidos.
Por último, para que todas estas investigaciones tecnológicas lleguen a buen término, la marca nipona continuará su trabajo ayudada por Stanford, la Universidad de Michigan y el MIT. Asimismo, el Instituto de Investigación de Toyota ha invertido en unas instalaciones propias en Massachusetts y en MCity -Mobility Transformation Center-, en Ann Arbor, Estados Unidos. Con estos pasos, Toyota espera poder trasladar varios de estos adelantos tecnológicos a sus modelos de producción.
